Soy un ganador y no un perdedor, así soy yo...
Jay y Jake son despedidos de su trabajo por dos "niños fresas", mismos que terminaron robando su corazón.
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- ¿De qué hablas wey? - Lo miró confuso. ¿Acaso a su amigo le había gustado un de esos niños...
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— Pus yo creo que eso sería todo— estiró ambos brazos hacia delante — . Solo hay que arreglar unos detalles y practicar todo de nuevo en estos días.
Los chambelanes se despedían realmente exhaustos, listos para regresar a sus casas. Los primeros en irse fueron Yeonjun y Soobin, ya que Doña Cleo le encargo a Yeonjun que Soobin regresara temprano a su casa, a pesar de que Kai les pidió que se quedaron un rato más, no tuvo éxito alguno así que se fue el también directo a su casa.
Los amigos de Ni-Ki aún se quedaron un rato. Sunghoon, sin embargo, parecía inquieto.
Se había escapado de su casa para estar en el ensayo, y ahora se enfrentaba a la idea de regresar solo en la oscuridad, y además no quería encontrarse con sus padres después de la discusión y probablemente tener una más grande si se daban cuenta que se había escapado de su casa.
— ¿Estás bien? ¿Quieres que te acompañe a casa? — Jake, como siempre, atento, se acercó a Sunghoon.
— Gracias, Jake — le sonrió — , pero no quiero que te metas en problemas por mi culpa
Antes de que Jake pudiera responder, Heeseung intervino.
— Ya es tarde, chicos. Deberíamos irnos
— Pero....¿y Sunghoon? Ya es algo tarde así que-
— Sunghoon puede regresar a su casa solo, ha estado en casa de Sunoo antes así que claramente conoce el camino — agregó poniendo atención a la reacción de su amigo que solo lo miró algo extrañado.
— Ps sí ya se we, pero ya es algo tarde — señaló el cielo — y hoy no trajo su carro-
— ¿Qué? — rió algo fuerte — ¿Tan grande y todavía necesita una niñera? Ya decía yo — se cruzó de brazos.
— ¿Qué? Puedo cuidarme solo perfectamente — encaró a Heeseung mirándolo de manera altiva. No quería discutir.
La tensión entre ambos hizo que los demás estuvieran atentos a su conversación que seguramente desencadenaría un pleito. Jake intentaba mediar la situación, calmar las aguas, pero ninguno de los dos parecía hacerse caso.
— ¡Bien! Vete con Jake si es lo que tanto te molesta, anda vete y agarralo de la mano para que no te pierdas. Seguramente habrá muchos allá fuera que quieran quitarte tus cosas, a ti, un muchachito tan indefenso y débil — exageró la voz haciéndola más chillonas y exagerando movimientos de súplica.
— ¡Heeseung! — Jake le llamó la atención.
— No, déjalo, está bien, se me hace tarde — les dio la espalda — . Los veo otro día.
Dicho aquello Sunghoon salió de la casa de la prima de Sunoo, se fue ignorando a los demás, no era su culpa, o quizá si, solía dejarse llevar cuando estaba enojado, pero ese muchacho no hacía nada más que ponerlo furioso.
