Dragón Enamorado

Cap. 015

Después de que JungKook le diera un recorrido por todo el hotel a Jimin ambos se dirigieron a la salida para poder regresar a casa, pero no sé esperaban que se encontrarían con la madre del Alfa.

—Jimin, cariño— la mujer tomó las mejillas del menor —¿Cómo te sientes?

—Estoy bien, señora Jeon— contestó y notó las uñas de la mujer, eran como las garras de JungKook, pero más cortas y estaban muy bien arregladas, ahora que lo pensaba las garras de su esposo siempre estaban limpias y limadas, tenían filo, pero siempre era cuidadoso.

—Que alegría, espero que mi hijo te haya cuidado bien~.

—Él estuvo en todo momento conmigo, le estoy muy agradecido~.

—Más le vale— pellizco con suavidad la mejilla de la alpaca —Espero que puedas ir al festival.

—¿Festival?

—Si, ¿No notaste los arreglos que se están haciendo en el pueblo?

—No...

—Es el aniversario de la fundación del reino, muchos vienen aquí a celebrar, hay una feria, espectáculos, comida y más, es realmente divertido— miró de reojo a su hijo —También es un buen día para salir en parejas, estoy segura que te encantará asistir~.

—¿Cuándo es el festival? — preguntó tímidamente.

—Será el viernes, pero se puede alargar hasta el domingo.

—Me encantaría ir~.

—Ya escuchaste, JungKook, como esposo de Jimin debes llevarlo y también como príncipe tienes prohibido faltar.

—Lo sé, mamá— el dragón asintió —¿Dónde está mi hermana?

—Ella fue a la ciudad a arreglar un asunto de su trabajo, ¿Necesitas verla? — soltó las mejillas de Jimin.

—No, solamente se me hizo extraño que no estuviera detrás de ti— tomó a su esposo para seguir caminando —Nos vemos luego, mamá— se despidió y salieron del hotel —Perdón, si no la distraía no nos dejaría ir pronto.

—Me cae bien tu mamá, es linda~.

—Lo es, pero a veces es algo entrometida...

—¿Te cayeron bien mis padres?

—Los dos son muy serios y parecen ser algo estrictos.

—Lo son, pero tienen su lado amable~.

—No niego que lo tienen, pero creo que no me aceptan muy bien.

—Ellos no confían en los de afuera y yo tampoco lo hacía, siempre que un extranjero iba al reino debía ser acompañado por un guía asignado.

—¿Por miedo al exterior decidieron que la boda fuera en su reino?

—Creo que si— se encogió de hombros —A mí sólo me avisaron unos tres días antes justo antes de irme a dormir, al siguiente día me mandaron a hacer un traje, mi madre empacó mis cosas unas horas antes de la boda.

—Fue bastante rápido...

—¿Cómo fue para ti?

—Me lo dijeron en la cena, el mismo día que firmaron el contrato, me hicieron preparar mi casa para recibirte y mi familia se encargó de comprar cosas de tu gusto.

No era tan mentira lo que dijo, pero había algunos detalles que omitió como el hecho de que casi se ahoga cuando le dieron la noticia, la discusión con su madre, el cómo le imploro para que cancelará porque él no quería que las cosas se dieran a la fuerza, su hermana leyendo su diario para saber qué cosas le gustaban a Jimin y así poder arreglar la casa que su mamá se encargó de comprar para ellos, la señora Bae encargándose de los arreglos de la casa. Fueron unos días bastante duros para él.

—Fue algo inesperado para ambos, seguramente tú ya tenías tus planes o hasta salías con alguien.

—No salía con nadie, pero si fue inesperado— trato de disimular.

Desde pequeño estuvo interesado en Jimin, ¿Cómo es que lo había conocido si el reino de las alpacas era tan cerrado?, Fue un accidente y en resumen pasó cuando apenas estaba aprendiendo a controlar su forma animal y manejarse en el cielo, voló demasiado hasta llegar al reino, por casualidad vio a un pequeño bebé alpaca y desde los ocho años se quedó flechado que su alfa rechazaba a cualquier Omega que se le acercase y era obligado a ir al reino de las alpacas a verlo, aunque sea de lejos.

Al regresar a casa se encontraron con que la señora Bae había limpiado todo y hecho la comida, dejando una nota donde informaba que se había retirado porque debía cuidar de su esposo.

Lo que quedó del día ambos se la pasaron viendo televisión o algo así, Jimin se había entretenido con el celular de su esposo que parecía que haría un berrinche cuando llegó la hora de dormir.

—Bien, hasta mañana, Minnie— se despidió y salió de la habitación para dirigirse a la de invitados en la que él dormía.

Jimin se quedó abrazando su alpaca de peluche y no lograba conciliar el sueño, así que haciendo el menor ruido tomó ropa del armario del alfa para usarla como parte de su pijama y solamente así pudo dormir.

Al siguiente día JungKook fue levantado por la señora Bae y él fue despertar a Jimin, notó de inmediato que estaba usando una sudadera de él, pero prefirió no mencionarlo; aunque estaba realmente feliz.

—Te llaman— Jimin aviso y le entregó el celular al mayor para que contestará.

—Gracias, Minnie— tomó el móvil y se apresuró a contestar. Desde que le mostró su celular el menor había quedado encantado con aquel artefacto y se lo pedía prestado, solamente se lo devolvía cuando encontraba otra cosa que llamaba su atención o cuando tenía una llamada, eso último era una condición para que se lo prestará porque las primeras horas que se lo prestó Jimin contestaba las llamadas con un "JungKook no está" y colgaba para seguir jugando.

—Kook— Jeon al escuchar la voz de Taehyung se levantó de su lugar y salió del comedor.

—¿Qué sucede, Taehyung?

—Hobi se metió al Castillo y no encontramos el vino que te dieron y el vaso de Jimin ya estaba limpio, pero escuchamos algo que confirma que si había algo más en la bebida.

—¿Qué escucharon?

—Estaban diciendo que con Jimin en celo era imposible que no quedará en cinta.

—Entonces ellos lo provocaron...

—Si, también creo que tienes una cita con tus suegros para el próximo mes, creo que quieren ver si su plan funcionó y que ustedes estén esperando un cachorro.

—Se van a llevar una decepción.

—Si, creo que tienen muchas ganas de ser abuelos.

En cuanto terminó la llamada le devolvió el móvil al Omega que siguió viendo vídeos, pronto le compraría uno, por ese momento disfrutaría que su Omega se acercaba sin miedo.

—Mañana iré a recoger tus guías de estudio para los exámenes de universidad.

—¿Tú crees que logré entrar a alguna? — preguntó dejando el celular de lado.

—Por supuesto, ¿Por qué lo dudas?

—Porque me he dado cuenta que este lugar es muy diferente del que yo vengo... Todo es distinto y seguramente todo lo que yo aprendí no servirá aquí.

—No debe ser tan diferente y si se te dificulta yo te ayudaré cuando lo necesites.

—Gracias, JungKook~— el alfa se quedó en silencio hasta que se atrevió a hacer la pregunta que tenía en mente.

—¿Tus padres desean mucho ser abuelos?

—¿Abuelos?

—Ajá, en la cena ellos estuvieron insistiendo mucho sobre el tema.

—Me pareció extraño, a ellos no les gustan los niños— se encogió de hombros —Tal vez la edad los afecto.

—Tal vez...