Capitulo 15

61 3 0
                                    

Hermione se despertó tarde al día siguiente.

No quería bajar luego de lo sucedido. Se sentía bastante mal luego de toda la situación. Charlie la había acompañado a su habitación y le había hecho prometer que, si algo pasaba o no podía dormir, podía contar con él. Se sentía raro tener tanto apoyo de él, sobre todo porque nunca habían hablado demasiado.

Ese día debería ver a Malfoy en su mansión. El solo hecho de pensar en ir a verlo luego de todo lo sucedido el día anterior la hacía querer quedarse en la cama, pero también, sabía porque iría. Estaba un paso más cerca de tener a sus padres y eso la hacía feliz. Se había decidido que luego de la guerra ella viviría con ellos y se quedaría todo lo que le fuera posible.

Se levantó después de posponer por una hora el momento, dando vueltas en la cama e intentando dormirse para simular que se había quedado dormida. Eran cerca de las doce del mediodía y le sorprendía que nadie la hubiera ido a despertar, aunque cada uno estaba en sus asuntos.

Tomó una toalla y se dirigió al baño. Pasó un largo rato dejando que el agua caliente le recorriera el cuerpo haciendo que este se pusiera rojo, pero no era importante. Sentía que el agua podía limpiar toda la vergüenza que había pasado la noche anterior.

Cuando terminó, abrió la puerta y revisó que no estuviera nadie. Recorrió la pequeña distancia que había y se metió en la habitación, que, para su suerte, estaba vacía.

Pasó un rato largo considerando que ponerse. No porque le importara, sino, porque una parte de ella quería encontrarse con Ron antes de salir y que la viera arreglada yendo a otro lado. Se sintió una adolescente tonta con ese pensamiento, pero también sabía que una parte de ella quería tener esa venganza.

Miró su placard y tampoco tenía demasiadas cosas, aparte, no quería aparecer en un vestido a ver a Malfoy, eso sería raro. Así que se dedicó a elegir un conjunto que le quedara bien, pero sin ser demasiado ostentoso.

Dedico un poco más de tiempo a acomodar su pelo. Últimamente solía tener su maraña despeinada y con poca vida por lo que uso las cremas para que al menos su pelo no pareciera un nido de paja.

Se miró el espejo y le gustó el resultado. No parecía demasiado arreglada, pero si se notaba que había puesto más empeño que otras veces.

Se miró al espejo y tomó aire varias veces, juntando valor para bajar y, sobre todo, para lo que tenía que hacer.

Tomó su bolso y se dirigió hacia abajo. Pudo escuchar unas voces a los lejos y cuando pisó el último escalón, pudo ver que Harry, Ginny y Ron estaban comiendo en la mesa.

– ¡Hermione! Sentimos no haberte esperado, pero queríamos dejarte dormir – Le dijo Harry – Hay comida, ¿Vienes a sentarte?

– Gracias, pero tengo cosas que hacer.

– ¿Qué cosas? – Preguntó Ron, con un tono bastante serio.

– Nada muy importante, nos vemos a la noche – Y con ese comentario salió por la puerta.

– ¿Creen que tenga una cita? ¡Estaba más arreglada de lo normal – Escucho decir a Ginny

– No lo creo – Dijo Ron de muy mal modo.

Hermione no pudo más que sonreír y se desapareció.


Paso las siguientes dos horas dando un paseo por un pueblo cercano a la mansión. Entró a cada tienda y miró cada cosa como si le interesara. Pregunto precios, se concentró en buscar motivos para comprar algo y luego los porque no debía hacerlo. Ocupó su cabeza en cada cosa que fuera en no pensar en lo que iba a hacer.

Arcade [Dramione]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora