No podía dejar de caminar de un extremo a otro en su propia habitación. Se sentía inquieto. Las manos le hormigueaban y sus pies se sentían como si quisieran partir corriendo a un lugar que su mente aún se negaba a aceptar.
Izuku quería ir con Shoto. Deseaba tanto hacerlo y decirle que lo que había dicho no era lo que sentía en verdad. Que se había dejado engañar de una forma que se arrepentía tanto de haber aceptado.
Quería decirle que no quería que se fuera.
Pero Izuku sentía eso como algo egoísta, algo que no se permitía ser, pero también algo que sentía con tanta desesperación querer hacer.
Y la respuesta a eso, era simple. Quería a Shoto y posiblemente algo más. No soportaba la idea de que se fuera. Izuku se arrepentía con tanta fuerza de lo que había hecho; de lo que había dicho. La culpa no dejaba de emanar en su ser. Comenzaba a ver que había cometido de los errores más grandes de su vida.
Era consciente de que le había roto el corazón a Shoto y sentía una culpa sin fin por eso. Quería remediarlo, pero no solo eso, quería volver con Shoto, y decirle la verdad. Decirle cuánto lo quería y lo que en verdad sentía por él. Que sus sentimientos sí eran recíprocos
Ya lo tenía decidido. No necesitaba sobrepensarlo más. Si tanto lo quería, no podía dejarlo ir así, no sin que antes Shoto supiera la verdad.
Izuku tomó una chaqueta para el clima frío y después miró su reloj. Faltaba media hora para que su vuelo saliera. Aún podía alcanzarlo, si iba a toda velocidad, podría hacerlo.
Salió tan rápido como pudo de su departamento y tomó un taxi con la misma velocidad. Debido al clima, el tráfico estaba más lento de lo usual por lo que Izuku se dió cuenta que muy probablemente no llegaría tan rápido como le gustaría al departamento.
Miraba el reloj cada minuto, con las manos temblorosas y su cuerpo sintiendo la adrenalina a todo lo que se podía. Estaba inquieto, demasiado, temía llegar cuando Shoto ya se hubiera ido. Era un escenario que se negaba a imaginar.
Maldecía el clima lluvioso porque, era debido a él, que no podía avanzar más rápido y que su última oportunidad para remediar las cosas, se estaba agotando.
Pasaron casi quince minutos antes de que pudiera llegar a su destino. Salió disparado del auto y solo podía pensar en llegar al piso de Shoto. Quería imaginar con todo lo que había en su ser que no era demasiado tarde, que él aún estaba ahí y que podría decirle todo lo que deseaba antes de que se fuera.
Izuku se arrepentía enormemente de las desiciones que había tomado, por qué después de tanto tiempo, ¿seguía haciendo caso a Shinso? Le gustaba pensar que ya no tenía poder sobre él, pero lo que había hecho demostraba todo lo contrario, por eso quería remediar su enorme error que ya era capaz de ver.
¿Qué importaba si Shoto provenía de una familia poderosa y adinerada? ¿Qué importaba si la sociedad los veía mal por cualquier razón? Izuku se atrevía a decir con seguridad que conocía a Shoto, y no al que Shinso le había mencionado el cual hacia ver como una persona engreída, sino al verdadero Shoto. Aquel que amaba el arte y pintar. Aquel cuyos sentimientos eran más puros y sinceros que los de cualquier otro, pero simplemente no le gustaba mostrarlos. Él conocía al verdadero Shoto, no al que solo personas como Shinso veían con interés por su linaje.
Lamentaba que tuviera que irse para que pudiera darse cuenta de eso.
Tomó el ascensor y mientras subía, uno de sus pies se movía de manera desesperada. Todo su cuerpo le pedía que corriera tanto como pudiera hasta alcanzarlo.
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Sonido En El Silencio | TodoDeku (FINALIZADA)
FanfictionIzuku es sordo. Pero él no nació así. Debido a un accidente, perdió su capacidad auditiva y dos de las cosas que más amaba. Desde entonces, su alma se apagó y ese brillo resplandeciente que solo lo caracterizaba a él; se fue. Después de ese trágico...