Capítulo 35: Kawaii

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Me levanté a las seis y media.

No por gusto.

Sino porque estaba acostada muy abajo en la cama y me escurrí hacia arriba para tener la cabeza totalmente apoyada en la almohada.

Y mi cuello decidió acarrear con todo el peso de mi cuerpo para subir.

Me dio el tirón más doloroso de mi corta vida.

Automáticamente me senté y me quedé estática para ver si se me pasaba.

Pista, no.

Me dolía tanto que no podía ni mover la cabeza.

Cuando destensé los hombros pude estirarme brevemente pero me dolía horrores.

Intenté volver a tumbarme, pero me moría.

Así que decidí hacer yoga.

Que siempre ayuda.

Estuve una hora haciendo yoga.

Ni así se me quitó el dolor, pero se redujo considerablemente.

Ya eran casi las ocho y había quedado con Katsuki a las diez.

Aunque a él le pareció un poco tarde, pero yo quería dormir.

Decidí escribirle por si quería cambiar la hora, ya que me sobraba el tiempo y tenía hambre.

Y si hay suerte, desayunamos en una cafetería bonita y aesthetic.

Cómo me gusta comer fuera de mi casa.

Luego me quejo de no tener dinero.

Katsuki, me he levantado temprano y he pensado que si preferías salir antes.

Por gracia divina me respondió casi al instante.

Estaba terminando de entrenar, me ducho y salimos.

Paso uno, conseguido.

Okay

Por cierto, has desayunado?

Si quieres desayunamos fuera y así ahorramos tiempo

Qué lista soy.

Como quieras, en media hora estoy en tu puerta

Paso dos, completado.

I am a genius.

Tengo media hora.

Y necesito verme bien.

Me metí en la ducha, y con el cuello chungo me intenté duchar lo más rápido posible.

Ayer cuando me acompañó a casa, solo decidimos a qué hora íbamos a quedar, y me sirvió como calentador ambiental.

Además, él se fue a dormir a su casa, que no estaba tan lejos.

Por eso no iba a tardar tanto en venir.

Luego me vestí con un jersey negro, que es mi favorito, porque dejaba los hombros al descubierto, como un estilo barco o bardot.

Básicamente se me veía bien el cuello.

Mi cuello chungo.

Y me gusta cómo me queda.

Después me puse unos pantalones negros, con cinturón y unos botines, negros también.

No. (Katsuki Bakugou y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora