Capítulo 37: Chocolate

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Estábamos las cinco féminas haciendo el chocolate.

Más bien, esperando a que hierviese la leche y entonces quitar el cazo del fuego.

En un principio, íbamos a hacer solo para nosotras, pero la manera en la que los muchachos se empezaron a repartir el bizcocho, dio la impresión de que querían también.

Y al preguntar.

Pues nada.

A hacer once chocolates.

Once.

Yo no sé si tengo tantas tazas en mi casa.

Kaminari y Kirishima estaban fregando los platos mientras hablaban con, ahora, Jirō y Mina.

Distrayéndomelas.

A mí me da igual que alguien haga ruido. 

Siempre y cuando haga algo.

O sea que perfecto, por lo menos ayudan.

No como otros.

Giré la cabeza cual demonio hacia mi hermano, el cual estaba entreteniendo a Uraraka y Tsuyu.

Él distrayéndome al resto de las féminas.

Me quedé sola moviendo el chocolate, para que no se pegara.

Todas se habían esfumado con los chavales.

Qué desgracia la mía.

-_____: ¿Alguien puede bajar seis tazas más?-

Gracias a Dios, existía Todoroki, que se colocó a mi lado para ayudarme.

Ya no soy la única aquí sola, aunque a mí no me están distrayendo.

Pero bueno, por lo menos Kirishima y Kaminari dejaron todo limpio y guardado.

Todoroki también pasó el chocolate a una tetera de cerámica. Quién sabe de dónde la sacó.

Porque en mi casa solo se usa de decoración.

Y no recuerdo si tenía alguna.

Ordenamos las tazas en una fila y empezó a repartir.

No sé si Todoroki sería capaz de calentar el chocolate directamente con su kosei, así ahorro luz.

Aunque para eso esta Kaminari.

¿Su familia pagará la factura o se escaquean?

Ojalá me llenase un generador cada tanto y así ahorro.

Yo me quedé en mi sitio con mi tacita, ya llenada; dejándole todo el trabajo a Todoroki.

Empecé a comer sin prisa, todos ya se habían servido y se estaban repartiendo por la casa.

Mas bien por el salón, se sentaron en un sofá mi hermano y las dos féminas, Uraraka y Tsuyu. Y en el otro Todoroki, Izuku y Katsuki.

Kaminari y Jirō se habían puesto en frente de la televisión, ya que estaban conectando la Nintendo.

Les encantan los videojuegos. Además, animaban al resto a jugar, al final era contagioso.

Yo me puse detrás del sofa, donde se sentaba Todoroki, porque Mina estaba apoyada en este.

-_____: ¿Tú no quieres sentarte?-

-Mina: Es que tengo mucho frío. Estoy viendo si moviéndome un poco se me pasa.-

-_____: Es que ya es diciembre.-

-Mina: Hace más frío en esta casa que en la calle.- Me hizo tanta gracia que casi derramo el chocolate en la cabeza de Izuku. -Ni con el chocolate consigo entrar en calor.- Tenía las dos manos agarrando la taza, intentando calentarlas.

No. (Katsuki Bakugou y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora