Capítulo 26- El descubrimiento

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James

Aunque mi vista está fija en la carretera mi mente no deja de pensar en mi extraño sueño ¿En qué estaba pensando? Miro de reojo a Emma que está sentada de copiloto. Lleva unos pantalones negros y un suéter gris que deja al descubierto uno de sus hombros. Mis pupilas se posan sin poder evitarlo en su piel descubierta y puedo rememorar el tacto de mis manos sobre su espalda desnuda. Mis dedos cosquillean al instante y me obligo a apartar la mirada. Las imágenes aparecen una tras otra en mi mente. Se sintió tan real que de verdad pensé que habíamos compartido ese momento. Dejo salir el aire de mis pulmomes bruscamente aún metido en mis pensamientos y apoyo mi brazo sobre la ventanilla abierta

Se sintió tan real

No dejo de pensar en ello desde que me he levantado. Siento como si mis dedos ya hubiesen recorrido ese camino antes, como si hubiésemos esperado ese momento durante mucho tiempo. Me miro la mano distraídamente. No puede ser. No puede sentirse real porque eso nunca hubiese pasado en la vida real. Miles de ideas cruzan por mi mente y ya no sé qué pensar, o mejor dicho, como sentirme ¿Cómo me sentí? En ese momento realmente quería besarla, necesitaba besarla ¿Y cómo me siento ahora mismo? Mi mirada vuelve a Em, el viento desordenada su melena mientras ella mira distraídamente por la ventana. Está preciosa. Intento detectar mis emociones ¿Qué tontería estoy pensando? Es Emma, en la verdadera realidad nunca la besaría. Es como mi hermana y los hermanos no besan a sus hermanas. Tan solo ha sido un estúpido sueño, no significa nada ¿Verdad? Las dudas vuelven a mí por milésima vez

- Te acabas de pasar la universidad- la voz de Adam me saca de mi mundo

- ¿Qué?- mascullo intentando terminar de despertarme

- Que te acabas de pasar la universidad- miro por el retrovisor para comprobar como dejamos atrás la universidad

- Mierda, lo siento- redirijo el coche hacia nuestro destino. Tengo que concentrarme. Miro a Em, que parece estar en su propio mundo ¿En que estará pensando? Me obligo a concentrarme y no volver a hacer el ridículo

Aparco y no sé porqué no me muevo del asiento, veo atentamente como mi amiga sale del auto. Me paso la mano por el pelo desesperado. Me voy a volver loco.

- Ni se te ocurra volver a pensar en ello, tan solo es un estúpido sueño- me ordeno a mi mismo antes de seguir a mis amigos hacia la entrada de la universidad

Tan solo llevamos una hora de clase y ya no aguanto más, tan solo quiero dormir y comer, en definitiva irme a casa. Apoyo la cabeza en la palma de mi mano mientras paso mi mirada por la clase, bufo al no encontrar nada con lo que entretenerme.
Adam parace igual de aburrido que yo y no puedo evitar aprovechar ese aburrimiento para deshacerme definitivamente mis dudas, no hace falta decir que no he podido dejar de pensar en mi sueño ni por un momento.

- Oye- le susurro a Adam intentando no llamar la atención del resto de estudiantes, que escuchan atentamente las palabras del profesor ( lo que debería hacer yo)

- ¿Qué?-me dice sin apartar la mirada del profesor

- ¿Alguna vez has tenido un sueño extraño?- pregunto casi desesperado y su atención pasa rápidamente a mí. Comienza a pensar ante mi atenta mirada

- Una vez soñé que era una mosca gigante y jugaba un mundial de ajedrez

- Ese tipo de sueño no idiota- De verdad que no sé cómo puede ser tan listo y estúpido a la vez. Contengo mis ganas de pegarle una colleja

- Ah, ya te entiendo- me mira juguetón levantando las cejas continuamente- Un sueño caliente- dice más alto de lo que pretendía llamando la atención de varias personas

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