El camino hacia ti (Jinx)

Capítulo 7

—¿Por qué estás empacando abuela? — una pregunta simple que no debería tomarle tanto tiempo responder.

—Bueno, he tenido tanto trabajo últimamente que creo que me merezco un descanso— sé que miente, no tendrá ningún descanso, debe estar sintiéndose mal o algo así.

—Pero ¿A dónde irás? Quiero ir contigo.

—No es posible mi niño. No deberías dejar las clases, habrá exámenes pronto y eres el mejor, estaré lista para darte un gran abrazo a mi regreso— ella normalmente me explica las cosas mirándome a los ojos, ahora no hace más que meter y sacar cosas de la maleta equivocándose con lo que se supone que quiere llevar.

—Abuela ¿Qué pasa?

—No pasa nada, yo creo que es mejor que vayas a dormir es tarde y la profesora no tarda en pasar a revisar tu habitación, además ahora tienes un compañero— excelente, me cambia el tema.

Ahora recuerdo a para lo que vine hasta su dormitorio, vine a preguntarle sobre Jaekyung, vine porque esperaba que pudiera explicarme qué rayos hace él ahí y durante cuánto tiempo va a quedarse.

—Sobre Jaekyung ¿Cuánto se quedará? — la escuchó soltar un gran suspiro y toma mi mano para hacer que me siente junto a ella sobre su cama.

—Necesito que me ayudes con él.

—¿Ayudarte?

—El tío de Jaekyung vino a verme, tal parece que no ha tenido las cosas fáciles, hace dos años que su tío lo acogió porque su padre fue llevado a prisión.

—¿El papá de Jaekyung está en prisión? — vaya sorpresa, todo un delincuente como su joven hijo que se enreda en peleas clandestinas para obtener dinero de sucias apuestas.

—Dan, necesito que no hables sobre esto con nadie, todo esto deberá ser un secreto entre nosotros— me sostiene las manos y asiento como indicándole que puede confiar en mí—. El tío de Jaekyung, el señor Park, me contó que ha tenido problemas para regular el comportamiento de su sobrino, le preocupaba la idea de que pueda meterse en nuevos problemas y que no lleve su potencial intelectual al máximo. En sus palabras, Jaekyung es un buen chico; alguien inteligente que no tendría por qué tener las notas que tiene, su tío aspira a que al menos termine la preparatoria.

—Pero abuela Jaekyung no tiene interés en obtener buenas notas, además el instituto no es una guardería.

—Es por eso que necesito que me ayudes. Dan, cariño, ustedes eran mejores amigos, estoy segura que algo debe quedar de esa dulce amistad de la infancia. Soy una vieja y las viejas no nos equivocamos con esto, creo que le agradas, creo que se siente cómodo cuando te tiene cerca.

—Claro que no abuela— si ella supiera lo que me hizo hace poco ¡Eso fue acoso sexual! ¿Qué diablos pensaba cuando me lamió el cuello? Fue asqueroso y a la vez me dio miedo—. Yo no le agrado.

—Necesito que lo ayudes a estudiar, a que sea puntual con sus horarios en las clases, a que entrene formalmente con el equipo al que se unió una vez que este recuperado y que salga victorioso de los exámenes que están por venir ¿Crees que puedas hacerlo?

—Abuela, no creo que Jaekyung...

—Deberías ir a tu habitación, pasa de la hora marcada. Llamaré a la profesora Lim para decirle que estás conmigo, ahora regresa— prácticamente soy echado por mi propia abuela. El tiempo pasa y ella sigue sin ser sincera con lo de su enfermedad, se esfuerza por lucir saludable cuando estoy con ella, pero nada me saca de la cabeza que debe estarla pasando mal cuando se queda sola.

Avanzo dos pasos y retrocedo tres. La verdad es que no quiero llegar a mi dormitorio, ahora ni siquiera tengo mi cama y no dudo ni un poco que Jaekyung tenga algo preparado.