CAPÍTULO 10

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4 años soportando su estupidez, tiene maldad pero solo la descarga contra Mel,  nisiquiera hace un buen trabajo porque las cosas que le hace son tonterías, el único momento en que si hizo algo grabe fue ayer, cuando tomó el pendrive pero no tuvo una buena táctica, ni tampoco lo escondió bien.

Quise matarla ahí mismo pero tuve que tolerarla, y en lugar de romperle el cuello la abracé para poder quitarle el Pendrive. Tenía uno de repuesto pero debía devolverle el suyo, el que compró exclusivamente para esa presentación.

Hoy era su graduación, nadie la iba a acompañar Ni Camille, ni Enzo iban a asistir. Así que decidí ir con ella y darle su regalo de graduación personalmente.

Ella ya estaba en la universidad, pronto empezaria la ceremonia y yo estaba terminando de arreglarme es un evento de gala así que no debo desentonar.

Salí de mi habitación y Estela me vio sorprendida, sus ojos se posaron en el obsequio y arqueo una ceja.

–Una debilidad.

–Yo no tengo debilidades.

–Y, ¿porque vas con ella?

–Porque quiero, ¿tienes algún problema? Es mi plan, son mis piezas yo veo como las muevo.

–Espero que no te equivoques.

–No lo estoy haciendo, yo jamás me equivoco.

–No seas arrogante, Dereck.

–Lo soy porque es la verdad, Todo lo eh conseguido por mi mismo, el poder, el respeto y el miedo.

–Lo se.

–Entonces no me digas que hacer, ni como ser.

La deje en la aún sentía su mirada pero la ignore y salí de la casa, directo a mi moto la cual encendí y tome el rumbo a la universidad, Mel no sabia que asistiría así que seria una sorpresa.

La carretera estaba despejada así que no me tomo mucho tiempo llegar, aparque y la ceremonia ya había iniciado. Busque a Mel y la encontré en las filas del medio, sentada y sonriendo, preciosa así se veía con su toga negra y su birrete del mismo color solo que con un cinto rojo.

Empezaron a llamar a los egresados no les preste atención hasta que escuche el de ella, Mel Williams. Subió a recibir su título con una sonrisa que la hacía brillar.

Poso sonriente ante los fotógrafos del evento, luego su mirada se dirigió a mi y esa sonrisa se ensancho más el fotógrafo la capto con esa gran sonrisa. Bajo de la plataforma luego de despedirse de sus maestros y corrió hacia mi, extendi los brazos para recibirla pues su alegría me gritaba que necesitaba un abrazo.

–Pensé que no vendrias–Dijo aun abrazándome.

–Era sorpresa, pero igual te veías tranquila estando sola.

–Si viviera esperando a los demás, entonces terminaría deprimida.

–Chica lista.

Ella se separo y aún sonreía, esa sonrisa duraría todo el día oh hasta que olvidara la Euforia de haber culminado su carrera. Extendí mi mano y le di el obsequio, aunque no era el único solo queria ver su reacción al ver este.

–¿Un regalo, enserió?

–Es un día especial, creo que por hoy, solo por hoy puedo imitar las costumbres de la gente normal.

–Que considerado.

Río y tomo la caja de tercio pelo verde, la pedí en ese color por sus ojos y ella lo noto, acariciando la caja antes de abrirla. Sacó la pequeña esfera de nieve que en lugar de contener alguna casa, adentro tenía su proyecto, el hospital infantil y el proyecto por el cual ganó las mejores calificaciones graduandose con honores.

Ludus mendacium  (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora