CAPÍTULO 23

46 9 7
                                    

Tipo de narrador: Omnisciente.

Dereck Davies caminaba hacia la puerta de su apartamento, no tenía miedo, tampoco nervios. Sólo la necesidad de controlarse para no tener que discutir con Mel sobre su hosco comportamiento.

Estaba apunto de abrir la puerta pero ella lo hizo, su semblante era de nervios la conoce y sabe cuando está nerviosa. Ella se aparto y el entró puso sus manos en las mejillas de ella, Mel sabía lo que hacía la estaba revisando. Noto la pequeña marca roja en su cuello, acaricio esa zona y le dio un beso en la frente Luego se giro dándole la cara al hombre que veía toda la situación.

Axel no decía nada, solo veía al chico frente a él con asombro. No sabía a qué habían venido, Mel no le había dicho nada solo que esperara; el chico camino hasta quedar a diez pasos de distancia.

–Soy Dereck Davies, uno de los trillizos que tu esposa estaba gestando.

–¿Como paso?–Axel no supo que más decir mientras tomaba asiento ya que se sentía un poco mareado por la noticia.

–Enzo le pidió a Lina y Carlos Davies que nos mataran, no pudieron hacerlo así que decidieron huir. Nos cuidaron y amaron como sus hijos pero al cumplir los 15 años la felicidad se acabó, Enzo descubrió todo así que viajo hasta Alaska y mato a mis padres, a mi hermano e intento hacer lo mismo pero el lacayo fallo y aquí estoy, tratando de deshacerme de él y usando a su única debilidad.

–¿Como lo supo?

–Por mi–contestó Mel– El tenía una sospecha pero no sabía el paradero, así que me amenazó para que los rastreara. Luego me juro que solo queria recuperar a sus nietos ya que habían sido secuestrados; Cuando regreso sin ellos no pregunté nada, solo esperaba que en algún momento ellos llegarán pero un año despues me encontré con Dereck y apoye totalmente su plan.

–Albert, me dijiste que se llamaba Albert.

–Si, ese era su nombre; Albert Davies–Dijo Dereck.

–¿Quién nació primero?

–Según mi madre fui yo, luego Albert. Ella jamas nos mencionó a tu hija pero supongo que ella nació de última.

–Tu hermano era mi Levi–Axel tenia lagrimas en los ojos– Y tu, tu eres mi Lion.

–Buen nombre, pero me quedo con el que me dio mi padre.

–¿Puedo ver una foto de tu hermano?

Dereck miró a Mel y ella se dirigió a la habitación, al regresar traía consigo la única foto que Dereck tenia de su hermano, aquella foto familiar que sacó de su casa antes de huir.

Mel se la entrego y Axel lloro sin importarle ya ser un hombre mayor, pues al ver a su hijo noto el gran parecido que Albert tuvo con Ana. El miraba la foto y miraba a esos dos chicos tan diferentes; uno sonreía y el otro estaba totalmente serio, mientras la pareja que los abrazaba sonreían, el hombre abrazaba por los hombros a Dereck, la mujer estaba abrazada con Albert. Se notaba el amor que había entre ellos y se lamento, lamento que todo eso se los haya arrebatado su padre.

–Lo siento, enserió lamento por todo lo que has pasado pero te prometo que todo terminara pronto, hijo.

–Detente, no necesito que me protegas y tampoco me llames hijo. Toda mi vida me eh cuidado solo, hasta mis 15 años cuide a mi hermano y después de eso eh sobrevivido y forjado mi vida; Tu eres padre de Mel y de Camille pero no mio.

–No quise abandonarte, perdóname.

–No pienso que nos abandonaste, fueron causas del destino pero no por eso te llamare papá e iremos de pesca. Todo seguirá igual y también me entregaras a Enzo y Camille, La venganza es mía así que me los daras.

Ludus mendacium  (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora