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TaeHyung había terminado su clase de matemáticas, y se sentía animado porque podía irse una hora antes gracias a la ausencia de la señorita SoYoung

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TaeHyung había terminado su clase de matemáticas, y se sentía animado porque podía irse una hora antes gracias a la ausencia de la señorita SoYoung. Gracias, gripe.

Él iría a casa solo, porque MinJae estaba ocupado entrenando al equipo por la ausencia de JungKook y sus amigos en sus clases correspondientes. TaeHyung esperaría a JiMin y YoonGi, pero sabía que tardarían demasiado y ambos eran los primeros en decirle que no era necesario que los esperara.

TaeHyung cerró su taquilla, suspirando tranquilo y pensando en la de cosas que haría aquella tarde. Probablemente, adelantaría algún que otro proyecto, o se distraería con algo cuando fuera a hacerlo. Siempre pasaba lo mismo.

Sin embargo, alguien lo paró.

— TaeHyung, necesito que vengas conmigo ahora — Shownu estaba de repente al lado de su casillero, después de correr a gran velocidad hacia él. Apoyó su gran mano en la puerta de la taquilla de TaeHyung, el ojiazul brincó y chilló del susto.

— ¿Qué? — logró murmurar confundido, parpadeando incrédulo.

— Es una urgencia, por favor, eres el único al que escucha — jadeaba el alto jugador en defensa de fútbol americano. Sus cabellos, que siempre estaban perfectamente peinados hacia atrás, ahora estaban desordenados y alocados.

— ¿A qué te refieres? — TaeHyung balbuceó, y todo aquello lo estaba asustando.

— Es sobre JungKook, está en descontrol.


◇◆◇◆◇


TaeHyung y Shownu corrían por el aparcamiento de la Universidad, TaeHyung sentía que su corazón iba a explotar por correr tanto y que sus pobres y cortas piernas no estuvieran acostumbradas, le daban calambres.

JungKook.

JungKook estaba en descontrol, según le había dicho Shownu. TaeHyung estaba nervioso y preocupado.

— ¿Qué está pasando, Shownu? — logró preguntar, jadeando agotado y sintiendo que el aire abandonaba sus pulmones.

— JungKook, eso es lo que pasa — contestó el mayor, y TaeHyung sintió envidia porque no jadeaba y su voz sonaba tan tranquila y normal como si estuviera caminando sobre nubes — Está peleando con JinYoung, de último año.

— Mierda, JungKook — masculló entre dientes el menor.

TaeHyung no se esperaba encontrar a JungKook agarrando al chico del cuello de la sudadera, con sus nudillos salpicados de lo que era la sangre del chico, y con un feo labio partido. Se veía desordenado, respiraba agitado y furioso, y sus nudillos eran blancos de la presión.

La cara de ese tal JinYoung estaba hecha un completo desastre, su nariz estaba jodida y sangraba. JungKook alzó su puño de nuevo con el fin de golpearlo de nuevo, con su mandíbula tensa y sus dientes chirriando por la ira.

— ¡JungKook, basta, por favor! — TaeHyung exclamó, corriendo hacia JungKook sin dudar. Los ojos verdes lo miraron al instante, casi desesperados al oír la voz de TaeHyung.

— ¿TaeHyung? — balbuceó JungKook, y su labio estaba sangrando con un hilo carmesí cayendo hasta su barbilla.

— JungKook, deja al chico en el suelo. Por favor — pidió TaeHyung, poniendo sus manos en su brazo. JungKook lo miraba aún muy sorprendido, casi sin creer que el chico de baja estatura estaba a su lado — JungKook, por favor.

JungKook iba a hablar, pero JinYoung tosió y escupió algo de sangre, farfullando un 'Maricón mamón' que hizo gruñir a JungKook de nuevo. TaeHyung habría dejado que JungKook golpease a ese tal JinYoung, porque sabía que JungKook golpearía a todo el que TaeHyung le dijera. Pero TaeHyung era así, y no le gustaba, mucho menos disfrutaba de los golpes y las peleas.

Vio que JungKook alzaba aún más su puño, esta vez con mucha seguridad y claridad. TaeHyung lo paró de nuevo — Déjalo, JungKook, por favor. No merece la pena, por favor, no lo hagas.

Los amigos de JungKook miraban sorprendidos como el pequeño ojiazul era capaz de dominar a ese salvaje y territorial león llamado JungKook. Las manos de TaeHyung acariciaban su brazo, porque sabía que eso relajaba y calmaba la ira de JungKook un poco más.

Poco a poco, los puños de JungKook se relajaron y JinYoung se liberó finalmente. Tosió ahora con libertad, y se marchó de allí avergonzado y apaleado, murmurando entre dientes, algo que TaeHyung escuchó como 'Jodido loco'.

— Está bien, JungKook, tranquilo. Ya se ha ido, relájate — murmuró suave TaeHyung, viendo que JungKook limpiaba la herida en su labio, pasándose la mano por la boca — ¿Por qué hiciste eso, JungKook? ¿Acaso no ves que podrías salir aún más herido?

— Estoy bien — masculló JungKook, y su voz sonaba tan ronca y rasposa, tan malditamente sexy y bonita como siempre — No tienes por qué preocuparte.

— JungKook, hermano, ¿estás bien? — preguntó Shownu, que ahora se aproximaba por primera vez.

— He dicho que estoy bien — gruñó irritado.

— ¿Se puede saber por qué hiciste eso? — TaeHyung presionó, y ahora corría al trote para alcanzar los pasos de gigante que JungKook daba — Te estoy hablando, ¿no me vas a responder?

JungKook parecía ignorar el hecho de que su labio había vuelto a sangrar, porque caminaba hacia su coche con las llaves en la mano. Levantó su gorra con el logo del equipo de futbol americano de la Universidad y peinó sus rizos hacia atrás.

— ¿Podrías dejar de correr, JungKook? — gruñó TaeHyung — Deberías ir al hospital, o a la enfermería. Y decirme por qué has golpeado a JinYoung.

— Agradezco que te preocupes, pero no lo haré — contestó JungKook, y TaeHyung sabía que estaba evitando el tema — Tengo cosas que hacer.

— ¿Qué es lo que te ha dicho JinYoung, que te ha afectado tanto que lo has golpeado hasta romperle la nariz? — inquirió TaeHyung, cruzándose de brazos y frunciendo el ceño.

JungKook abrió la puerta de su coche rojo, y quedó estático. Se giró hacia TaeHyung, y sus ojos chocaron.

— Algo que ese pedazo de mierda no debería de haber soltado.

Agresivo ✧ KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora