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JungKook y TaeHyung se encontraban en el tejado; ambos estaban recostados y TaeHyung había usado dos sudaderas porque el frío le calaba los huesos

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JungKook y TaeHyung se encontraban en el tejado; ambos estaban recostados y TaeHyung había usado dos sudaderas porque el frío le calaba los huesos. Por fin la tormenta había parado, y eran las cuatro de la mañana cuando eso pasó. JungKook insistió muchas veces en sentarse en el tejado y TaeHyung se negó rotundamente. Sin embargo, ahí estaban los dos, con una debajo de ellos para que no se empapasen la espalda.

— ¿Alguna vez te has preguntado cómo es que las constelaciones se forman? — JungKook preguntó, con sus ojos mirando el cielo estrellado que ahora se encontraba totalmente despejado. Estaba tan oscuro que las estrellas brillaban en todo su esplendor, y TaeHyung ahora entiende por qué JungKook insistió tanto en salir de la cama — Yo de pequeño siempre creí que era porque alguien de arriba jugaba al billar con las estrellas — Hizo una mueca — Hasta que mi profesor de ciencias me lo explicó todo.

TaeHyung sonrió, mirándolo con curiosidad — ¿Jugar al billar con estrellas? Eras un niño muy creativo.

JungKook se encogió de hombros — Tenía una mente inocente. Mira — Señaló hacia el cielo — ¿Ves esa constelación? La del cuadrado.

Los ojos de TaeHyung se entrecerraron y trataron de ver — Es la de Virgo, ¿no?

— A mí me recordaba a un jugador de la NBA encestando — Admitió. TaeHyung rio — Esa, la de Leo. A mí me parece un ratón con su cola, ¿lo ves? Ahí está la cola, y ese es el hocico.

— Dios mío, he vivido en una mentira toda mi vida — Admitió entre risas TaeHyung, por la absurda clase de constelaciones, según la vista de JungKook. El rizado sonrió, tarareando.

— Soy alguien con muchos talentos, TaeTae.

— No dudo eso, Kookie — Tarareó el menor.

Un silencio se abrió entre ambos, silencio en el cual TaeHyung se dedicó a sonreír porque ahora las constelaciones no eran de los horóscopos, sino de las formas que JungKook inventó, y el rizado se dedicaba a observar sus ojos brillantes y la manera en la que sus labios se curvaban en una encantadora sonrisa.

— Cuando el perro de mi hermana murió, le dije que las constelaciones eran agujeros que el Señor Abrazos hacía y que estaban alineados — Comentó JungKook, riendo un poco. TaeHyung lo miró.

— ¿Tienes una hermana?

— Pequeña. Se llama NaYeon, es más mayor que tu hermana Tzuyu.

— Eso es un gesto muy bonito, JungKook — El ojiazul musitó con sinceridad y calma, JungKook lo miró y ambos mantuvieron el contacto visual. La mirada verdosa de JungKook no se despegaba de TaeHyung en ningún momento, y eso ponía nervioso al ojiazul.

Aunque un hermoso cielo estrellado se alzaba en ese instante, TaeHyung no podía encontrar mejor constelación que los brillos en los ojos verdes de JungKook, o sus rebeldes rizos, que se entrelazaban entre ellos y tenían una figura alocada.

Agresivo ✧ KookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora