Narra Roña*
- Jajaja y de seguro luego viene el obizon y los agarra, y se los come, y...
Nadia- Roña, basta!!!!tenemos miedo- grito la enana, me pidieron que les contara un cuento y como estaba haciendo la tarea quise divertirme un rato.
Nico- No dale seguí nosotros no tenemos miedo
- Bueno y luego la princesa fue rescatada del obizon por su príncipe
Nacho- Nah, ya no es buena
Sol- Pero al menos es más linda
- No he terminado chicos. Luego de que la princesa y el príncipe se fueran a su castillo, el obizon los siguió. Se volvió invisible y seguía a la princesa por todas partes. Le susurraba, abría puertas para asustarla y también le escondía cosas
Justo en ese momento entro Sofía.
Nadia- Ay!!EL OBIZON!!- los cuatro gritaron pero giraron y dieron un suspiro al darse cuenta que nada más era Sofía.
Sofía- El obizon? Esperen yo conozco ese nombre. Un cuento?
Sol- Si nos lo estaba contando Roña.
Sofía-Roña- dijo retandome y dándome una sonrisa.
Nico- Si pero mira que no teníamos miedo es más queremos saber cómo termina.Sofía- Bueno pero miren por qué no le van a preguntar a Jime que yo tengo que hablar con Roña. Jimena se sabe todo el cuento y también otros.
Nacho- Bueno vamos mis guerreros que yo los protejo de él obizon- dijo el enano a lo que todos salieron.
Sofía cerró la puerta y me quedo mirando retadora . Parada con los brazos cruzados.
- La señorita me va a retar. A ver decime cual es mi castigo.
Sofía- Sos re malo, mira que asustar a los chiquitos.
- Pero que queres? Me vinieron a molestar,además estaba aburrido
Sofía- Y que necesitas para dejar de estar aburrido? Digo aparte de asustarlos a los chiquitos- dijo sonriéndome a lo que no pude resistirme.
- Quieres que te lo diga?- me levante y me acerque a ella en la puerta
Sofía- Si, a ver decime- dijo acercándose a mi también con sus brazos que seguían cruzados.
- Bueno, digamos que podría hacer bromas, hacer jodas o...
Sofía- o?- dijo safando sus brazos
- o esto- dije agarrando sus manos acercándola a mi para besarla y luego agarrar su cintura.
Era normal que la besara. Estábamos muy acostumbrados. Teníamos todo y a la vez nada. Aunque nos besábamos seguido cada segundo sin sus labios se me hacían eternos. Al fin nos separamos porque nos quedamos sin respiración.
Sofía- Vaya manera de no aburrirte.
- Créeme que si fuera por esto me aburriría cada segundo.
Sofía- Sos un idiota
- Lo se pero igualmente te...- me detuve bruscamente por que le iba decir que por eso le gustaba. Crei que sería incómodo.
Sofía- Que? Igualmente que?
- No nada, tranquila
Sofía-Roña, decime
- No, no es nada además decime querías hablar conmigo no?de que?
Sofía-Veni sentémonos- me tomo del brazo y nos sentamos en mi cama. Más bien yo me senté y ella se acosto en mis piernas.
-Bueno y ahora? De que querías hablar fresita?
Sofía- De Pato y Yago. Mira yo te cuento algo si no se lo decís a nadie. Se que puedo confiar en vos pero prométemelo.
-No dudes de mi fresita, eres más importante para mi que los demás. Te lo prometo.
Sofía- Bueno, lo qué pasa es que Pato y Yago se confesaron. Lo sabias?
-Ah eso. Si claro que lo sabía es más me enteré el mismo día qué pasó. Yago me lo contó.
Sofía- Y Pato me lo contó a mi ese día también. Como que tenían telepatía.
- Si, pero y que con eso?
Sofía- Es que ellos se confesaron, ahora se hablan o se echan miradas de amor pero todavía no se dicen nada.
- Mira fresita, vos sos una genia pero yo soy Roña, me explicas mejor.
Sofía- Ay Roña, Bueno básicamente lo que digo es que tenemos que hacer que sean novios o algo por el estilo. Ya conocen sus sentimientos, no pueden seguir así, tienen que hablar y quedar en algo. Así pueden disfrutar libremente- cuando dijo eso me acorde de nuestra propia situación.
- Fresita, no te parece que si vamos a hacer eso, primero tenemos que tomarlo en cuanta nosotros?
Sofia- Nosotros? Y por que nosotros?
- No te hagas. Sabes muy bien que me gustas. Me re encantas fresita- ella me sonrio. Deje un lado la incomodidad y se lo dije, me sentí más libre al hacerlo.
Sofía- Y tu a mi. Roña tu crees que es tiempo de que hablemos de nosotros?
- Si, yo creo que si. Decime lo que me tengas que decir fresita.
Narradora*
Sofia estaba nerviosa y Roña también. Después de tanto tiempo, había llegado el momento de aclarar sus sentimientos.
Sofia- Te quiero, te quiero como no te lo imaginas, pero tú?
Roña- Yo a ti te quiero igual. Sabes? No puedo evitar no mirar esa hermosa sonrisa que tenes. No soporto un segundo sin tus labios. Sofia queres ser mi novia?- dijo sabiendo que la respuesta sería si pero seguía nervioso.
Sofia- Si, te re quiero nene- se lanzó contra Roña, quedando encima de él en la cama.
Se miraron. Esas miradas llenas de amor, de felicidad, de emoción. El pelo de Sofia inclinado resbalando por sus hombros. Los ojos de Roña que se encontraban de nuevo en ese profundo sentimiento de amor. Sus sonrisas que expresaban su alegría. Las manos de Roña que se encontraban en la cintura de Sofía. Y Sofía tenía una de sus manos en una de las mejillas de Roña.
Se besaron. Con ternura, con amor, con derecho. A partir de ahora eran novios. Tocaron la puerta. Por suerte esta vez no la habrían y los encontraban en una situación comprometedora. Era Paro que entró cuando los chicos se sentaron apresurados acomodándose su ropa.
Pato- Chicos, vengan a el living. Prepárense.
Sofía- Prepararnos porque?
Roña- Y Yago?
Pato- Está abajo, está medio mal, más bien enojado nos necesita. Roña estamos contigo tranquilo.
Bajaron las escaleras y vieron que todos estaban reunidos y tapaban algo en la puerta. Se metieron entre los demás y al llegar al frente vieron a una persona que llegaba a arruinar todo loq ur habían progresado. Lucia.
Lucia- Roña, cómo estás? No sabes como te extrañe- dijo abrazando a Roña. Pero el no le respondió el abrazo, se quedó quieto por unos segundos, para luego empujarla suavemente y alejarse con una mirada de odio.
Apenas se alejo de ella. Sofía tomó su mano, las entrealzaron. Los dos sabían que la vuelta de Lucia significaba dolor. Mucho sufrimiento y sería difícil sobrevivir pero lo harían porque ahora estaban juntos.
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-Nunca digas nunca-
Fanfiction100 vidas, dos almas gemelas. Acaso alguna vez se preguntaron si de verdad el amor valía la pena. Pueda que si o muchas veces NO. Pero como todo se puede si de verdad se quiere. El amor de Sofia y Roña seguirá su rumbo.