Besame

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Narra Roña*

Desperté y inmediatamente pensé en Sofía, en donde estaba, como estaría y si estaría pensando en mi. Me puse la ropa del hogar y levante a Yago para bajar y el bajaría luego de ponerse su uniforme.

Era sábado y no muchos de levantaban pronto. Yo era uno de ellos pero hoy me levante con tanta energía. Iba a la cocina pero vi a Pato en la sala así que decidí sentarme con ella.

- Buenos días Patito, en que pensas?

Pato- En lo que hablé con Belén, la verdad es lo que me dijo me dejó pensando- se acomodó doblando sus piernas en el sofá y yo puse mis manos a su alrededor. La abraze y ella se acercó a mi. Parecíamos una pareja lo sabía pero a ella la quería como mi hermana.

- Ob, si de lo que hablaron, pues yo pienso...- dije parando en seco ya que Pato no podía saber que la espie- Bueno pues yo pienso que... primero me deberías contar de lo que hablaron no crees?- dije nervioso.

Pato- Si tenes razón- dijo acurrucándose más a mi lado- lo qué hablé con Belén fue de que termine con Barracuda y que ahora creía que me había enamorado de otro chico.

- Te enamoraste? Y quien es el afortunado?- dije sonriendo

Pato- Bueno el "afortunado" es...

Yago- Ah hola Chicos- Yago había estado allí viéndonos, estaba quieto y recién me di cuenta que estaba muy cerca de Pato- perdón si interrumpo voy a la cocina- dijo como si le hubiera dolido quería ir detrás de él pero Pato me iba a confesar de quien estaba enamorada y necesitaba saber.

Me quede, pero me sentía culpable por que Yago tal vez mal pensó la situación. Lo vi decepcionado y ciertamente enojado conmigo. No tuve otro remedio. Pato también se fijó en que Yago estaba mal o raro.

Pato- Que le pasa? Esta mal, porque tenía esa cara?- aunque sabía perfectamente porque decidí mentir.

- No, es Que lo levante muy temprano y hoy era sábado, por eso- dije fingiendo una sonrisa- dale contame, quien es el chico del que te enamoraste?

Pato- Bueno, ese chico es Yago- me dijo alo que sonreí porque sabía que se lo podría contar a Yago- pero Roña, yo se que sos el mejor amigo de Yago, así que prométeme que no le vas a decir nada

Me había dejado entre la espada y la pared. No sabía que hacer.

-No bueno tranquila te lo prometo pero porque no queres que se lo diga

Pato- es que no quiero dañar nuestra amistad, además no se si siente lo mismo por mi y si no me sentiría mal

- Bueno está bien yo no digo nada, pero le tenes que decir, prométeme eso vos

Pato- Dale, te lo prometo, vamos a la cocina que tengo hambre- dijo para agarrarme de la mano y llevarme a la cocina

Entramos a la cocina, sonriendo, todavía de la mano. Yago miró nuestras manos conectadas y se sentó bruscamente, luego de levantarse por un vaso creo. Pato se sentó con las chicas y yo con los chicos. Vi que Sofía no estaba así que decidí preguntarle a Yago.

- Yago, sabes dónde está Sofía?- dije a lo que el negó y se alejo de mi.

Supe que algo pasaba pero que sería. Estaba enojado conmigo? Que había hecho mal? De verdad le afecto que estuviera SENTADO con Pato?

- Estás bien?- le pregunte a lo que el me miró fijamente como si me dijera de mil maneras lo decepcionado que estaba de mi.

Yago- Tu que crees? Roña sos un desastre

- Pero decime que te pasa, eso por Pato, mira déjame explicarte, lo qué pasa es que...

Yago- No quiero hablar, tengo hambre, hablamos luego si queres amigo- dijo para empezar a comer a lo que supe que esa conversación terminó ahí.

Estaba comiendo muy poco y muy suave. Cuando estaba mal, o sentía que había hecho mal y que algo es mi culpa. Simplemente no tenía apetito. En ese momento llegó Sofía.

Sofía- Buenos días chicos, hola saverio- dijo saludándonos con una sonrisa.

Necesitaba correr a ella. Abrazarla porque sería la única que me apoyaría. No quería que Yago se enojara conmigo. Pensaría que estoy con Pato y con Sofi. Me quede en mi asiento hasta terminar de comer que Yago salió y lo seguí.

Subió hacia el cuarto así que lo seguí hasta que entramos y comenzamos a hablar un poco alterados.

- Ahora si decime, dale habla!

Yago- Bueno pues como te atreves?- dijo recriminándome- sabias que Pato me gustaba.

- Y lo se, lo se muy bien solo estaba sentado con ella Yago, SENTADO

Yago- Si claro tanto que la abrazaste, ella te abrazo y estaban muy, pero muy cerca. Vos crees que yo soy idiota?

- No aver déjame te explico veni cálmate

Yago- No no me calmo nada, vos ne dijiste que te gustaba Sofía, si mas que te encantaba. Pero luego te veo con Pato como si fueran pareja, COMO ME LO VAS A EXPLICAR

- Si a mi me gusta Sofía y estaba con Pato porque estaba hablando algo muy importante con ella. Además vos sabes que ella es como mi hermana y que no tendría nada con ella.

Yago- Ah entonces de que hablaron?

- Me dijo quien le gustaba o más bien de quien estaba enamorada- en ese momento Yago cambió su semblante aunó más relajado y curioso

Yago- Entonces, quien?

- Bueno ella me dijo que el chico era...-pare porque Pato me hizo prometer que no diría nada y ni aunque fuera para ayudar no rompería mi promesa- no no me dijo nada.

Yago- VES? Sos un cara dura nene, mentiroso, te fijas en la chica que le gusta a tu mejor amigo, sos una basura!!

Se fue empujando la puerta. Me senté frustrado. No podía hacer nada. Luego entro una persona muy especial para mi que daba vuelcos a mi corazón.

Sofía- Mal comienzo del día?- dijo parándose frente a mi bajando la mirada para conectar sus ojos con los míos fijamente. Los dos irradiamos sonrisas inmediatas.

- Muy malo, pero ahora mejor.

Sofía- pelea con Yago eh? Porque fue? Ustedes dos nunca se pelean, todo bien?

- No, todo mal pero no te puedo decir. Estoy mal no quiero pelearme con Yago lo quiero mucho.

Sofía- Te ayudo?

- Como? Ni yo se que hacer.

Sofía- Bésame, dale ahora- dijo a lo que me ansié porque lo deseaba tanto.

Ella se sentó encima de mi. En mis piernas y la sostuve de la cadera. Era algo nuevo pero muy excitante. Me encantaba, todo era travieso. La mire y la besé.

Han habido innumerables besos entre nosotros que éramos expertos con el otro. Nos conocíamos también en este tema. A ella le encantaba que fuera gentil y luego intenso. Aunque también le encantaba que fuera intenso y apasionado por que sabía que ella me volvía loco.

Lo hacía, me volvía loco. Todo su ser me tenía débil. Estaba completamente loco por ella.

Sofía- Me gustas como no tienes idea, es más me encantas- dijo para detenerse de besarme un rato.

Quede inédito. Nos sabía, que decir o hacer. No le respondí a lo que ella me dijo perdón y se quería ir pero no s Eli permití. No la solté de la cintura y solo la mire.

- Tu me vuelves loco a mi. No solo me gustas, te quiero. Eres especial y única fresita. A mi también me gustas como no tenes idea.

Sonreímos y solo nos apegamos mas porq volver a besarnos pero entró un bichito muy molestoso para mi gusto.

Nadia- Sofía, Roña que hacen? Son novios?eh mi hermana tiene novio- dijo comenzando a gritar a lo que Sofía solo se separó de mi y le tapó la boca.

Sofía- No capuchita, mira Roña y yo solo practicábamos para una obra.

Nadia- ah entonces no son novios?- los dos negamos con la cabeza- Bueno ni modos. Sofi me acompañas tengo que hacer una tarea y esta difícil. Me ayudas por favor.

Sofía- Claro capuchita ven vamos, hasta luego Roña- dijo guiñándome un ojo y saliendo con Nadia.

Era tan atractiva. En serio me volvía loco. Loco por todo.

-Nunca digas nunca-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora