Eras una gamer de excelencia, te encantaban los juegos de fantasía y romance, últimamente estabas obsesionada con un nuevo juego otome mezclado con peleas, habia muchos chicos lindos a escojer, pero la verdad tu personaje favorito era el jefe final...
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Este chico no era como otros sacrificios llevados al laberinto, este era muy distinto, no era un simple niño asustado si no un ávido cazador experimentado en tratar con bestias de gran tamaño, se ofreció como sacrificio voluntariamente para darle muerte a la monstruosidad que habitaba en el laberinto y liberar a su patria de entregar a sus jóvenes y doncellas al malvado rey que los había conquistado y que exige estos sacrificios como forma de sumisión.
Pero claro, nada es gratis en esta vida, a cambio de tal proeza, no solo queria fama y gloria cuando volviera con el cadáver de la bestia, también quería una gran fortuna y ser reconocido como un noble, este cazador pensó son no sería la gran cosa matar este gato enorme, sería igual que tantas otra veces, pero con los días se dio cuenta de su grave error, ya que estuvo por varios días vagando por el laberinto buscando un rastro que seguir y un sitio donde poner trampas, solo para descubrir que no había rastros que o señales que seguir no hay manera de poner trampas, más él era el que debía esquivar las trampas.
Estuvo rondando muriendo de hambre y sed, ya que la comida y el agua que logró traer a escondidas se le había acabado y ahora contaba solo con su cuchillo que también logró meter de contrabando, sabía que si se enfrentaba a la bestia en esas condiciones perdería, adios dinero, adios prestigio, adios título de nobleza y adios a todas las amantes que quisiera, todo se iba a ir al infierno, si no fuera por...
-Un gato grande fue al baile~ Tikiti tom ta Tikiti tom~ Un gato grande fue al baile~ Tikiti tom ti day~- Se Escuchaba la voz animada de una pequeña doncella que provenía de un pasillo.
-... ¿Eeh? Aún hay alguien vivo- Balbuceo el cazador siguiendo el sonido de tu voz.
- Un gato grande fue al baile~ Se llevó sus botas y su caballo~ "Ma cax macari duck and a dil"~ Tiki tom ti day~- La voz estaba saliendo de una sala al final de este donde dos grandes puertas de madera se encontraban.
-¿Cómo es posible que esté cantado con tanta confianza? ¿Acaso no le me a la bestia del laberinto o ya se volvio loca?- Volvió a hablar el cazador para sí mismo.
-Es el baile de los gatos y los ratones~ Tikiti tom ta Tikiti tom~ Es el baile de los gatos y ratones~ .- Seguía la alegre melodía mientras también los pasos de baile de alguien -Es el baile de los gatos y los ratone~- Con pequeños pasos redondos y cuadrillas~ "Ma cax macari duck and a dil"~ Tiki tom ti day~-
-Tal vez... Encontró la manera de sobrevivir... ¡Tiene comida!- Exclamó pensando en las posibilidades, solo tiene que robarle la comida ese pobre diablo, estará a salvo y listo para enfrentarse a la bestia.
Pensó este egoísta chico sonriendo con locura y sosteniendo con ambas manos el cuchillo que traía consigo, emociona por que aun puede conseguir los premios que exige, los dioses le sonreían en su opinión, siguio y siguio tu el sonido de canto hasta llegó a esta gran puerta, era imposible que un ser humano común pudiera abrirla, metálica y pesada, con de que algo marcas de garras forcejeo para abrirla en su momento, pero la supervivencia estaba al otro lado, así que reuniendo las pocas fuerzas que le quedaban para abrirla, pero por más que forcejeaba no cedía, sin embargo de un pronto a otro la puerta se abrió de la nada hacia dentro, haciendo que el chico cayera de cara y soltara su afilado cuchillo, pero antes de que pudiera arrastrarse para tomar, algo, o mejor dicho alguien le tapo la boca con su enorme mano.
-Oye, Ratón ¿Quieres que nos casemos?~ Tikiti tom ta Tikiti tom~ Oye, Ratón ¿Quieres que nos casemos?~ Tiki tom ti day~ Oye, Ratón ¿quieres que nos casemos?~ Tengo oro y Efectivo "Ma cax macari duck and a dil"~ Tiki tom ti day~- Seguías cantando mientras bailabas con el bastón de la escoba fingiendo ser una fogata en tu mente, dabas saltos y piruetas al ritmo de la música mental que tenías en la cabeza como si nada en el mundo te molestará.
El chico intentaba forcejear con quien lo mantenía tan fuertemente agarrado de la cabeza y le tapaba la boca, incluso empezó a patear y a golpear el brazo que lo sostenía, pero su captor lo ignoraba, estaba más concentrado en mirar tu danza y escuchar esa extraña canción, un gato que se quiere casar con un ratón, que pareja que extraña serían.
-No soy un ratón, pero si quieres me caso contigo- Dijo Leona con tono divertido, apretando su agarre para que este intruso no hiciera ruido
-¡¡AAAH!!... Ah hola Leona- Intentaste tocarlo mientras te movías en el lugar -Y no era pregunta, es una canción para bailar en una fogata- Seguías intentando encontrarlo -¿En donde estas? Que no te veo.... Bueno no veo en general jeje~-
-Estoy frente a ti herbívora, pero no te acerque mucho, estoy realmente sucio, me caí en un charco de lodo... O espero que sea de lodo- Dijo Leona con un ligero tono molesto y luego el cazador se giró para mirarlo mejor se dio cuenta al fin de quien lo retenía y que si estaba sucio... Pero no era lobo, el lobo no es color rojo, ni tiene un olor tan fuerte a hierro
-Oooh bueno si hay una sala que es un bosque frutal, entonces hay una que es un baño! Después de todo yo también quiero uno.... Llevo varios días sin tomarlo y me siento sucia- Dijiste sintiéndome incómodo por tener la piel algo reseca y el cabello grasoso por la falta de aseo -¿No nos bañamos juntos? Es que no me puedo bañar sola, me puedo ahogar-
-No creo que te puedas ahogar un riachuelo con 35 centímetros de profundidad- Dijo el león comenzando a apretar el cuello de su nueva víctima, quería romperlo y el cazador empezó a luchar más por su vida.
-No te creas, una vez casi me ahogo en uno de 10 centímetros, cuando no sabes dónde es arriba o abajo te paniqueas mucho...- Pero un sonido de "Crack" interrumpió tu explicación -¿Que fue eso?-
-Rompi una lanza para crear una antorcha, tal vez tu te puedes mover bien en la oscuridad pero yo- Dijo Leona como si nada dejando con mucho cuidado de no hacer ruido el cuerpo sin vida en el suelo -Andando herbívora, que no rato anochecerá y el agua se pondrá fria, odio bañarme con agua fría-
-¡Te sigo!- Y con eso Leona te tomo de la mano y te guio fuera de esa habitación, rodeando el cadáver del cazador que será el aperitivo nocturno del león, a veces le entra hambre en la madrugada -Con un poco de suerte y al fin encontramos a Grimm, espero que no la haya pasado muy mal estos días el solo-
-Seguro esta bien...- Fue todo lo que te dijo la bestia sin soltar tu pequeña y frágil mano, eras como el ratón de la canción y el gran gato, aunque en su mente queda mejor una pequeña coneja y un gran león.
