Eras una gamer de excelencia, te encantaban los juegos de fantasía y romance, últimamente estabas obsesionada con un nuevo juego otome mezclado con peleas, habia muchos chicos lindos a escojer, pero la verdad tu personaje favorito era el jefe final...
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Desde que se dieron ese baño juntos, tu relación con Leona a cambiado bastante, pero en un buen sentido, antes el león si bien era respetuoso, tampoco es que fuera cariñoso contigo, de hecho era algo tosco y rudo a la hora de tratarte, como si hubieran pasado mucho tiempo desde la última vez que trato con delicadeza a otro ser vivo, solo te tenía para conversar y no volverse loco de soledad, así como para usarte de almohada viviente.
Pero actúa más como un gato gigante, se abraza a ti, te lame la mejilla, a veces te da una que otro susto, por que te muerde de la nada, no tan fuerte como para lastimarte y hacerte sangrar, más bien parecía un juego brusco de su parte, y con respecto a la manera en la que duermen... Sigue siendo su almohada viviente, pero ahora te trata con más cariño y algunas noches te deja dormir sobre su pecho suavecito y peludo.
Y tú no dudabas en corresponder estos pequeños actos de cariño felino de Leona a tu manera, le acariciabas las orejas, le hacías trenzas en su melena, le besaste la mejilla, ustedes dos parecían una parejita enamorada sin serlo, y todos estos arrumacos mutuos solo le provocaba celos a Grimm, ya no era el michi favorito de su secuaz.
-Grrrr... ¡¡YO SOY EL FAVORITO!!-Dijo Grimm intentando retar a Leona ya que quería recuperar su lugar pero el león que fácilmente lo metió en un jarrón -¡¡HEY!! ¡¿COMO TE ATREVES A RECHAZAR EL RETO DEL GRAN Y PODEROSO GRIMM?!- Chillo Grimm desde dentro del jarrón.
-Si quieres te como si tanto quieres pelear- Respondió Leona como si nada.
-¡¡ESO SERIA TRAMPA!! ¡¡NO UNA PELEA JUSTA!!- Replicó Grimm aun mas enojado -¡Ademas no la tendrias ten facil, tengo a mi secuaz y a la diosa de mi lado!- Dijo confiado de que la diosa le salvaría el pellejo si las cosas se ponen complicadas.
-¿Y ustedes por qué discuten tanto ahora?- Preguntaste entrando en la habitación, por suerte en el último cambio del laberinto una sala vacía quedó anexada a la habitación de Leona, por lo que la usas por ahora como cuarto de lavado, tu ropa y la de Leona necesitaban aseo con urgencia.
-¡Estoy retando a este leon vago para recuperar mi lugar de tu #1!- Explicó Grimm asomando su cabeza fuera del jarrón -¡Pero Leona está luchando sucio! ¡¡ME METIÓ EN UN JARRÓN EN VEZ DE ACEPTAR MI RETO!!-
-Lo hice por que me hiciste enojar, me despertaste en la mejor parte de mi siesta- Refunfuño Leona cruzándose de brazos -Y agradece que no te comí de un bocado-
-¡¡VEZ SECUAZ!! ¡Es un salvaje!- Volvió a Chillar Grimm teniendo que salir solo del jarrón.
-No, no lo veo y Grimm no seas un gato celoso, Leona no te esta quitando tu lugar como mi gatito favorito- Dijiste con disgusto y llevándose ambas manos a la cintura, no es la primera vez que tu guardian empieza una pelea con Leona desde empezaron a vivir los tres juntos -Tu siempre seras mi gatito #1- Ese comentario hizo que el michi gris le sonriera de forma burlanada a Leona mientras que el león gruñía por lo bajo -Y Leona es mi leon #1, leones y michis no son lo mismo- Agregaste con una sonrisa alegre.
