Mi esposo inesperado (Narusasu)

Capitulo 12

Naruto no tardó en llegar a Rosebud.

Durante todo el camino, no dejó de pensar en ese beso, en vez de en la amenaza de Kabuto. Algo que no tenia sentido, pues el rancho era lo más importante para el.

Debia de estar angustiado ante la posibilidad de perderlo y, sin embargo, en lo único que podia pensar era en la ternura de los ojos de Sasuke y la calidez de su piel cuando rozó su frente.

Sasuke, Sasuke... ¿por qué no podia sacarse ese nombre de la cabeza?

Una vez en Rosebud, Naruto continuó cabalgando hasta el banco, pues sabia que su amigo Shikamaru estaría alli trabajando. Para el Nara , su banco era todo su mundo, como lo era para Naruto su tierra.

Y no se equivocó. Como se imaginaba, Shikamaru estaba en su despacho con las narices metidas entre libros de cuentas y documentos que cubrian su escritorio.

-Sabía que te encontraría aqui.-

-Vaya, ¿ya se ha cansado tu lindo omega de ti y te ha echado a la calle?-

Si cualquier otro hombre le hubiera dicho algo semejante, Naruto se habria enfadado, pero al tratarse de su amigo y decírselo con una sonrisa, supo que este estaba de broma.

Aun asi, tendría que pensar más detenidamente en el destello de celos y genio que habia sentido esta tarde con Kabuto y ahora con Shikamaru.

-En realidad, he venido por un asunto relacionado con el rancho.-

La seriedad con que Naruto habló, le indicó al Nara que su visita no era de cortesia.

Se conocían desde hacía muchos años y por consiguiente, Shikamaru sabia cuándo su amigo estaba preocupado por algo. Como era ahora el caso.

-¿Qué ha sucedido? ¿Han aparecido más vacas muertas?-

-No, pero creo que sé quién es el culpable.-

Shikamaru lo miró expectante y le indicó que se sentara mientras sacaba dos vasos y una botella de whisky del último cajón de su escritorio.

-Esta tarde Kabuto ha venido al rancho, Y no vino a hacerme una visita de cortesia, sino a insultar a mi esposo y a amenazarme.-

-Ese hijo de... espero que le dejaras claro que no vas a permitir nada de eso.-

-Mi puño le dejó un recordatorio en su ojo.-

-Bien.-

Y como por mutuo acuerdo, ambos hombres bebieron de un trago el contenido de su vaso.

-¡¿Qué más te dijo esa sabandija?-le preguntó Shikamaru al mismo tiempo que volvía a rellenar los vasos.

-Asegura que tiene un documento legal con la firma de mi padre, donde se verifica que le vendió la propiedad hace años al padre de Kabuto.-

-Menuda sarta de mentiras. Si eso fuera cierto, yo lo sabria. Además, con las ganas que tiene ese sinvergüenza de apoderarse de esas tierras, estoy convencido de que hubiera sacado a la luz ese documento hace años.-

-Eso mismo pienso yo. Lo mires por donde lo mires, no tiene ningún sentido, pero queria comentártelo antes de que se le ocurra alguna argucia legal.-

-Tranquilo, estaré pendiente de sus movimientos por si intenta falsificar algún documento.-

Por unos segundos, la habitación se quedó en silencio, como si ambos hombres estuvieran desenmarañando un acertijo.

-Esto me recuerda... No sé si tiene algo que ver, pero tratándose de Kabuto, y tras lo que me has contado, creo que está relacionado.- Shikamaru se inclinó hacia adelante, como si al acercarse se asegurara que nadie lo escuchara, aunque la puerta estuviera cerrada y no hubiese nadie cerca. -Esta mañana me dirigía a la granja de los Hyūga , cuando a las afueras del pueblo vi a un forastero. Daba la sensación de estar esperando a alguien. Pero lo que más me hizo sospechar, fue su aspecto de pistolero.-