Capítulo XI

177 27 0
                                    

Cuando Yunho cerró la puerta de la habitación en ese momento sintió los labios de Jongho en su cuello.

Respira, respira. Controlate. Se repetía una y otra vez.

Tomó con cuidado a Jongho por la cintura y lo guío hasta la cama. Sinceramente no sabía qué hacer. Había traído a Jongho a su casa porque no iba a dejarlo en la universidad en riesgo y en su casa no había nadie.

Pensó que podría ayudar.

No pensó en nada.

Podría pedirle ayuda a Haerin. Si, ella sabría qué hacer.

Iba a salir de su cuarto cuando escuchó a Jongho.

- No. No, no. Ven aquí, alfa-. Gimió, tratando de quitarse la ropa.

Madre santa, dame fuerzas.

- Volveré, espera aquí. No salgas- Jongho volvió a gemir, tratando de llegar hasta él- No. Omega, hazme caso, quédate aquí ya vuelvo.

Jongho está vez solo gimoteo y se quedó en la cama.

Salió y cerró la puerta. Ya no se escuchaban ruidos abajo. Camino hasta el cuarto de Haerin pero luego se detuvo a pensar.

¿Y qué carajos le voy a decir?

Oye ¿Tienes algo por ahí que uses durante tu celo para Jongho?

Hola, Jongho entró en celo, ayúdame.

Tips que puedas darme para sobrellevar un celo de un omega.

Ya, daba igual. Toco la puerta dos veces. Haerin apareció con audífonos y en uniforme todavía.

- ¿Pasa algo?

- Si... digamos que, traje a Jongho aquí porque entro en celo....- Haerin asintió, frunciendo los labios.

-Aja... bueno, me pondré los audífonos, no te preocupes no los escucharé.

- ¿Eh? ¡No! No iré y... ay dios, yo venía a decirte que qué debo hacer... digo, si comida y agua pero...- hizo una cara de confusión que Haerin se echó a reír.

- Jesucristo. Yo... no sé, Yunho- tenía cara de que quería reírse-, eres el mayor aquí, deberías saber que hacer.

- ¡Pues no sé!- levantó los brazos exasperado.

- Mira... pues... usa tu imaginación- otro lado menos a la cara de Yunho. Miró a Haerin.

- ¿Mi imaginación?- frunció el ceño.

- ¡Sí, Yunho! Pues lo que haces tú cuando estás en celo pero... piensa en sus necesidades-. Se encogió de hombros.

- ¿Sus nece...? Ah. Ah vale, ya. Gracias, adiós. Disculpa las molestias.- Y se fue. Haerin se echó a reír mientras cerraba su puerta.

Necesidades. No podía anudarlo, porque aún no hablaban de eso.

Mi imaginación.

Entró en su habitación y se encontró con la imagen más obscena que alguna vez pudo permitirse imaginar.

- A la mierda.- Se pasó las manos por su rostro.

Jongho estaba acostado en el centro de la cama de Yunho. Con las piernas abiertas y dobladas.

Mientras sus largos dedos entraban y salían de su entrada. Sintió un tirón en su entrepierna que tuvo que ignorar.

- Y-Yunho- gimió Jongho-. Oh dios. Ven, esto no es suficiente. Yunho.

Yunho respiro. Se acercó hasta él y se inclinó en dirección a su cuello para respirar el aroma que este soltaba.

Omega. Omega en celo. Anudalo. Márcalo.

Lovesick [2ho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora