Capítulo XXI

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Yunho estaba terminando de arreglar sus maletas. Ya le había dado la sorpresa a Jongho, se irían de vacaciones a una playa en México. El vuelo saldría mañana en la madrugada.

Unos toques en su puerta lo desconcentraron de su trabajo tratando de hacer que todo entrara en una sola maleta.

- ¡Pasa!- grito.

Minhyuk abrió despacio la puerta, sonriendo.

- Hola, amor-. Saludo en voz baja.

- Hola...- lo miro extrañado. Siguió doblando su ropa.

- Veo que... si era en serio el viaje y eso...- se sienta con cuidado en la cama de Yunho, encima del desastre de ropa.

- Si, bueno... Necesito pasar tiempo con Jongho- Sonrió.

- Entiendo.

Se quedaron unos minutos en silencio, mientras Minhyuk admiraba la cara de concentración de Yunho, tratando de averiguar cuál sería la mejor forma para acomodar todo.

- Sabes que... te amo ¿Cierto?- dijo de repente. Yunho alzó su mirada a Minhyuk.

- Eh, yo... si, supongo-. Respondió, no sabía que responder en realidad.

Nunca sintió realmente el cariño de su madre, nunca se sintió como una, en realidad.

- Lo siento si... perdón si no he sido la mejor madre para ti. No hay excusas, no te merecías todo esto-. Tuvo que parar cuando sus ojos se cristalizaron y su voz se cortó.

Yunho volteo a verlo nuevamente, relajando su semblante. Nunca había visto a su madre llorar.

- Mamá...- intentó hablar pero Minhyuk negó.

- No te vas a casar. No sé cómo... no sé cómo haré p-pero no lo harás-. Se limpió rápidamente las lágrimas que comenzaban a correr por sus mejillas.

- Oye... ya veré qué hacer, tranquilo-. Movió su maleta a un lado, para subir a la cama y ponerse a un lado de Minhyuk.

- Lo siento mucho, lo siento mucho- Murmuraba sin parar.

Yunho no supo qué era lo que exactamente estaba pasando. Abrazo a Minhyuk por el cuello y lo pego a su pecho. Se sentía mal al ver a su madre así, no entendía la razón, no entendía nada, pero podía sentir la sinceridad y el dolor de su madre, como si fuera propio.

- Tranquilo. Todo se resolverá, mamá. Solo deja de llorar o lloraré también-. Dijo mientras soltaba una risa apagada.

- Sí. Sí, perdón-. Se separó de Yunho limpiando su rostro.

- Está bien, mamá. ¿Quieres ayudarme con esto? No logro que todo quepa.

Minhyuk asintió. Por primera vez en muchos años, estaba haciendo algo con su hijo, algo que cualquier otra mamá podría estar haciendo. Y se sintió bien.

[...]

Pasajeros del vuelo 2467 con destino a Ciudad de México, favor de comenzar a abordar.

Minhyuk y las gemelas habían acompañado a Yunho y a Jongho al aeropuerto, que Minhyuk haya ido había desconcertado un poco al omega, más cuando Minhyuk lo había abrazado y le había dado un rápido beso en su mejilla.

- Yunho, cuídate mucho. Mándame un mensaje en cuanto aterricen ¿Si?- decía Minhyuk mientras seguía abrazando a Yunho por el cuello.

- Sí, tenlo por seguro. Ahora, suéltame o perderemos el vuelo- Dijo riendo Yunho, se alejó un poco y le dió un beso en la frente, para después hacer lo mismo con las gemelas.

- Cuiden a mamá ¿Quieren?- las gemelas asintieron.

Yunho se dió la vuelta acomodando su maleta de mano y tomando la de Jongho, para comenzar a caminar para poder abordar.

Minhyuk los miró nostálgico. Abrazando a las gemelas para darse la vuelta e irse.

Luego de largas horas de viaje, y hacer escala en Ciudad de México, la cual le pareció fascinante a Jongho, pudieron llegar a la tan adorada playa.

Jongho miraba de un lado a otro, saltando de emoción y agradeciéndole a Yunho una y otra vez.

Llegaron al hotel con la intención de dormir, pero Jongho repentinamente había cambiado de planes, así que ahora irían a la playa.

- Esto es genial, Yun. Muchas gracias, alfa- Se acercó hasta Yunho, tomando su rostro para darle un rápido beso.

- No tienes que agradecerme nada, omega.

Yunho sabía que estaba sonriendo como un tonto enamorado, viendo cómo Jongho colocaba su maleta arriba de la cama y la abría para sacar unos cuantos trajes de baño.

Yunho se acercó por detrás de él, abrazándolo por la cintura, Jongho de inmediato pareció esconder algo que tenía en sus manos, escondiéndolo con otras prendas.

- ¿Qué tienes ahí?- preguntó Yunho curioso.

- Nada, alfa- respondió rápido Jongho- ¡Rápido! Cámbiate, alfa, quiero ir. Por favor, por favor, por favor...

Yunho suspiró. Aunque estaba cansado, no podía decirle que no y quitarle la emoción a su omega, así que busco energías en lo más recóndito de sí.

- Lo que tú quieras, omega.

Jongho sonrió, volteando para darle otro beso al alfa.

Lovesick [2ho]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora