Lovesick [2ho]

Capítulo 29

- ¿Qué haces, alfa?- preguntó curioso Jongho, mientras se acercaba a Yunho por detrás para abrazarlo.

Yunho suspiró frustrado- Son papeles de la empresa.

- ¿No entiendes algo?

- Si lo entiendo, no son cosas tan difíciles en realidad. Solo estoy algo estresado. No estaba en mis planes comenzar a trabajar de un día a otro- se encogió de hombros.

- ¿Y por qué no vuelves a la escuela?

- Ya no puedo. Y además, mamá no gana tanto dinero, papá no creo que quiera ayudarme en eso cuando me está sacando provecho.

- Lo que hizo tu padre estuvo mal. Ya no tenía poder sobre ti para decidir sacarte de la universidad así porque sí.

- Lo sé... desearía haber sido listo para evitarlo- sonrió triste.

- Eres listo, amor- le dió un beso en la mejilla- Solo que Sungjae es un hijo de puta, y que me perdone su madre.

Yunho rió un poco.

- Te amo- susurro Yunho, sonriendo cuando sintió la felicidad de Jongho como propia.

- También te amo, Yunho.

- ¿Tienes planes para el siguiente fin de semana?

- Creo que no ¿Por qué?- pregunto curioso.

- Hice algo para ti- se encogió de hombros.

- ¿Qué? ¡Dime! No me gustan las sorpresas- el alfa sonrió- ¡Yunho! No debiste decirme ¡Ahora dime!

Yunho soltó una carcajada- ¡No te diré! Es sorpresa, Jongho ¿Conoces el punto de las sorpresas?

- ¡Sí y por eso no me gustan!

- Pues ahora te aguantas, amor- volteo un poco el rostro para darle un beso.

- Te odio- murmuró Jongho en broma separándose de él para acostarse en la cama del alfa.

- Ajá, ajá...

- En serio.

- Seguro, amor- sonrió.

Luego de unos minutos en silencio, la voz de Jongho sonó en la pequeña habitación.

- No es cierto, te amo. Gracias por... lo que sea que vaya a ser la sorpresa.

- También te amo, omega.

Yunho de verdad estaba feliz de tener a Jongho.

Probablemente ahora mismo estaría perdido. Jongho había sido su ancla para los momentos en los que sentía que no podía más. Con todo el caos en su casa, Jongho siempre era eso que estaba ahí. Lo esperaba con los brazos abiertos y dejaba que llorara por horas, para después consolarlo.

Jongho era eso que no sabía que necesitaba. Era lo que había buscado siempre. Por algo nunca funcionó con nadie más, ahora lo entendía.

- Amor...- hablo despacio Yunho, acostándose a un lado de Jongho.

- ¿Qué pasa?

- Quiero... preguntarte algo, pero no tienes por qué responder ¿Está bien?

Jongho asintió, nervioso por la actitud de Yunho.

- ¿Qué sucede, alfa?

- ¿Recuerdas la vez que fuimos a tu casa y luego me quedé a lavar los trastes?

Yunho había apoyado su cabeza en el hombro de Jongho, y ahora se encontraba acariciando su pecho.

- Si...