Lovesick [2ho]

Epílogo

Ocho años después...

- ¡Minji y Jeong Jinsik!

El grito del omega dejó a los dos mellizos estáticos provocando un escalofrío en sus cuerpos.

- ¿Qué sucede, mami?- dijeron los dos cachorros al mismo tiempo.

- ¡Pero miren el desastre que hicieron! Le dije a su padre que no los dejará mojarse.

- ¡Papi nos dejó!- grito Jinsik.

Jeong Jinsik y Jeong Minji. Mellizos del matrimonio Jeong. Minji era una alfa, una pequeña niña de ojos preciosos con cabello largo y lacio. Mientras que Jinsik era un omega, ojos negros y cabello igual de lacio que su hermana. Eran dos pequeños de tan solo cinco años.

- ¡Yunho!

El alfa entró a la casa con las manos detrás de su espalda y sonriendo como un angelito.

- ¿Si, amor?

- ¡Te dije que no dejaras que se mojaran! Mira el desastre que hicieron con la alfombra ¡Está llena de lodo!- Por dios. Jongho presentía que en algún momento le saldrían canas verdes.

- Se puede lavar, omega...- intentó remediar.

- ¡Pero qué les costaba no ensuciarla! ¡La puse ayer y van cuatro que arruinan!

Jongho se dió la vuelta y se fue directo a su habitación. Cuando llegó y se acostó en su cama, después se sintió mal por haberle gritado a sus niños y a su alfa. Empezó a llorar sin estar seguro si lo hacía de tristeza o de enojo.

Mientras tanto en la planta de abajo.

- La cagamos- Dijo Yunho mientras se pasaba las manos por su cara.

- Mami dice que no digas groserías-. Dijo la pequeña alfa.

- Perdón. Bien, ahora... subiremos ahí arriba y le pediremos perdón, le diremos que jamás volveremos a hacerlo ¿Bien? Pero hay que prometer no volver a hacerlo- levantó su dedo meñique- ¿Promesa?

- Si, papi-. Contestaron los cachorros al mismo tiempo, levantando también su dedito meñique.

Subieron y tocaron la puerta dos veces.

- Mami- Jinsik corrió hasta donde Jongho estaba acostado. Minji le siguió.

- Perdónanos- Dijeron los tres.

Yunho caminó hasta acostarse también, tratando de abrazar a todos.

- Prometo mandarla a lavar y también prometo que no volveré a dejar que se metan así a la casa-. Le dió un beso en la frente.

- Ya. Está bien, están perdonados, pero tengan más cuidado con lo que hacen, por favor.

- Si, mami- Contestaron los cachorros.

- Si, omega-. Yunho contesto.

[...]

Jongho estaba sentado en la tapa del inodoro, esperando a que las pruebas de embarazo estuvieran listas.

Desde hace unas semanas había estado teniendo algunos malestares y si sus sospechas eran reales, debió haber quedado embarazado durante el último celo de Yunho, eso fue hace un mes y medio.

Suspiro, su alarma sonó, dando a entender que las pruebas ya debían de estar listas.

- Bien. Cálmate o Yunho sentirá y ya no será sorpresa-. Respiro y tomo la primera prueba.

Positivo.

¡Seremos papás otra vez! Su omega chilló emocionado.

Tomo la segunda y tercera prueba.

Positivo.

- ¡Joder, si!- empezó a llorar de la emoción.

Este sería un gran regalo de cumpleaños para su alfa.

[...]

No había podido dormir. Estaba bastante emocionado pero nervioso. Yunho si quería otro bebé ¿No era así? Sus pequeños ya tenían cinco años, pronto cumplirían seis, estaban listos para otro bebé ¿No? ¿Y si Yunho no quería otro bebé?

Suspiro y se levantó de la cama.

- ¿A dónde vas?- murmuró un Yunho adormilado.

- Solo necesito ir al baño, sigue durmiendo- le dió un beso en la frente y se fue al baño.

Era domingo y eran las seis de la mañana. Decidió que armaría el regalo de Yunho. Le puso pasador a la puerta y sacó las pruebas junto con una cajita de cartón que había conseguido.

Guardo las pruebas ahí, y le colocó un pequeño listón color rojo.

Salió del baño siendo silencioso para que el alfa no se despertara. Dejó la cajita en el mueble del lado de Yunho, y se dispuso a dormir.

No pudo.

Yunho se despertó poco tiempo después.

- No pudiste dormir ¿No es así?- preguntó Yunho.

- Tuve un poco de insomnio, si...

- ¿Qué es?

- ¿Qué es que?

- Algo te pasa ¿Qué es?- volvió a preguntar.

- Nada, alfa. Feliz cumpleaños, te amo-. Le dió un beso, tratando de llevarlo más allá.

- No me distraigas con tu belleza. ¿Qué sucede?

- Abre tu regalo.

A la mierda ya.

Yunho se giró buscando su regalo, encontró la cajita y la tomó.

- ¿Es una lencería que te pondrás como hace dos años?- sonrió de lado. Jongho le dió un golpecito en el brazo.

- Abrelo, alfa.

Yunho se sentó en la cama y empezó a abrir la cajita. Cuando la destapó Jongho pudo ver cómo sus ojos brillaban.

- ¿Es enserio?

- Si, alfa.

Yunho se aventó sobre Jongho llenándole de besos el rostro. Jongho soltó un quejido al sentir todo el peso de Yunho sobre él, pero empezó a reír, lleno de felicidad.

- Gracias, omega, gracias- Yunho se separó de Jongho y miró las pruebas- ¿Cuánto tienes?

- Quizás un mes... un poco más- Jongho sentía a su omega chillar de lo feliz que se sentía.

- Seremos padres de nuevo, omega.

- Lo seremos, alfa.

- Dios, te amo, gracias.

Luego de eso, compartieron una vez más besos y caricias, como había sido durante estos últimos ocho años.

Hoy en día vivían en la misma casa que Yunho habia comprado hace un tiempo. Con sus dos pequeños y uno en camino. Casados hace cinco años, enlazados hace ocho, siendo pareja casi nueve años.

Vivían feliz, y cómodos con como era su vida voy en día. No cambiarían absolutamente nada.

Se amaban y tenían una pequeña familia. Estaban bien. Tal y como siempre habían querido.