Capitulo veintiuno

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Ya habían pasado algunos días desde que se mudó con YoonGi, y sin duda alguna lo que había vivido han sido los mejores días que había tenido en toda su vida, tener su compañía en todo momento le hacía sentir feliz.

Incluso en los momentos en el que peleaba con él porque no organizaba su ropa cuando la lavaba y la dejaba sobre un mueble tirado por algunos días.

Había conocido un poco más Daegu ya que iba con él cuando tenían que hacer las compras y en algunas de esas ocasiones se olvidan y terminaban teniendo una cita, la favorita que tenía por el momento fue cuando lo llevo a ver el planetario, había amado cada una de las actividades que tenían en ese museo, en especial uno que parecían estar solo rodeado de estrellas. Luego de eso tuvieron un picnic en un parque en la que se la pasaron contando historias de su niñez: una que le gusto cuando se lo conto fue que cuando era pequeño se escondió debajo de sabanas con tal de ir a la escuela, estuvo ahí por veinte minutos mientras su madre lo buscaba para terminar de prepararlo, solo lo encontró porque él se salió debido a que se estaba ahogando de calor entre las sábanas.

Por las noches dormían juntos como habían dicho desde un principio, era grandioso despertar y ser recibido por un aroma calmante como lo era la lluvia junto a un alfa cariñoso y dormilón que lo mantenía abrazado junto a él toda la noche; ahora que estaban conviviendo podía notar como su ex capitán realmente era un gran dormilón, podía dormir temprano y aun así despertar tarde todo lo contrario cuando estaban en el barco era el primero en despertar y el ultimo en dormir junto con el intendente Choi para monitorear que todo estuviera en orden.

Se encontraban viendo una película apoyados del mueble mientras doblaban la ropa que habían buscado del tendedero recientemente cuando YoonGi decidió pausarla.

—JiMin.

—Dime—respondió observándolo luego de doblar una camiseta.

—Quiero hablar de un asunto algo importante.

—Claro, yo te escucho—dijo volviendo doblar la ropa que aún le quedaba en su cesta.

—Quiero que me mires, es algo serio—declaro haciendo que se detuviera preocupándolo pensando que quizás había hecho mal o se había molestado con él—es sobre nuestra relación.

Se estremeció y enderezó su espalda, solo espera que no fuera algo malo.

Normalmente cuando no se sentían cómodos con algún tema o que sucedía algo externo lo hablaban entre ellos para poder solucionarlo, pero sentía algo de temor al escuchar "nuestra relación" no sabía si era efecto de que había visto muchas series que tenían ese tipo de escenarios y que todas terminaban mal después de esa frase, no deseaba que le pasara algo así.

YoonGi lo miraba fijamente frunciendo un poco el ceño al sentir feromonas de preocupación y tristeza, se maldijo en su interior por no haber medido en la forma que había dicho sus palabras, estaba seguro que había asustado a su pareja.

—No es nada malo —aclaro viendo como su Omega se relajaba.

—¿Entonces de que se trata?

—Quiero saber cuándo será tu próximo celo.

—Uh, es eso, —balbuceo para sí mismo— soy irregular, realmente no sé cuándo me llegará.

El mayor asintió lento comprendiéndolo.

Tenía entendido que habían casos de omegas así que sus celos eran irregulares, tardaban mucho en llegar y por eso como máximo llegaban a tener tres y como mínimo dos al año, cuando usualmente los celos de los omegas eran de cuatro a cinco veces al año en cambio de los alfas que eran solo dos siendo un poco parecido con los irregulares ya que estos también tardaban en llegar, pero era su naturaleza ya que si tenían más podrían provocar daños ya que habían algunos que ni siquiera aguantaban su propio celo y pierden la cordura con ello volviéndose más agresivos.

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⏰ Última actualización: Jun 05 ⏰

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