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Odio los días lunes quién sería el estúpido que inventó los días de la semana odio la escuela prácticamente detesto todo lo que está a mi alrededor.
Anoche no dormí absolutamente nada pensando en la competencia que tendré el día de hoy, cabe señalar que Gabriela así se llama mi madre no tiene ningún interés en asistir a dicho partido y sinceramente no es como si me interesara, ya que nuestra relación de madre e hija hace mucho que se estropeó gracias a ella, porque es cierto con sus actitudes logró alejarme de su lado, pero hoy podré ver a la mayoría de mis compañeras celebrando o llorando, pero junto a sus padres y yo a la única persona que tengo es a mi mejor amigo taehyung, ambos nos conocemos desde pequeños hemos pasado muchas cosas en el transcurso de los años lo que para las demás personas es una simple amistad para nosotros a veces va más allá de eso a lo que me refiero yo perdí mi virginidad con taehyung, y desde ese entonces nuestra relación no solamente es de amistad siempre que podemos tenemos sexo a veces actuamos como novios, pero no lo somos simplemente somos dos mejores amigos que comparten secretos y momentos íntimos, pero nada más aunque a veces siento que mi corazón sintiera algo por él, pero sería inútil ya que sí llegará a ser así nuestra amistad se iría al carajo.
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El partido estaba apunto de iniciar y puedo decir que por un momento me sentí nerviosa, pero debía hacerlo y sabia perfectamente que mi padre estaría orgulloso de mi, porque el también amaba el fútbol.
— Tn, vamos hoy debemos partirle el culo a esas tipas, recuerden somos nosotros contra ellas.
Todas asentimos y nos dirigimos a la cancha, pero por alguna razón vi a las gradas para ver si madre siquiera le daba la curiosidad de verme, pero no fue asi en aquél lugar sólo estaban los padres apoyando a sus hijos y al ver a taehyung una sonrisa se apoderó de mi, porque sabía que podrían fallarme todos, pero tae jamás lo aria.
Mientras veía a la gente gritar yo más corría detrás de aquella pelota y me estaba sintiendo muy cansada y frustrada y no entendía el, porque estaba de esa manera en este preciso momento.
Íbamos en segundo tiempo, nosotros ganando obviamente en el marcador, nuestro equipo estaba realmente feliz y la presión que sentía ya había desaparecido completamente.
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Aquél partido habia finalizado y veía amis amigas celebrar el haber ganado, todos reían y gritaban, pero yo seguia como si nada, las chicas y yo estábamos en los camarines conversando de la fiesta que ara lara, de hecho es tradición que si el equipo gana una de nosotros debe hacer fiesta en su casa y esta vez le toco ami amiga lara.
Yo no me iba a bañar aquí. Realmente me incomodaba hacerlo en estos baños, pero hoy si que debía hacerlo ya que no podía irme a casa oliendo tan hediondo ya que transpire mucho, las chicas se habian ido y quede yo sola y realmente no me importaba mucho ya que este lugar lo conozco al revés y al derecho y podria salir incluso con los ojos cerrado si asi lo quisiese.
