Sueño de Amor

Episodio 15

Era un día diferente, lleno de una luz distinta, tal vez por el sol radiante o simplemente porque Valentina tenía todo más claro. Con las palabras de su padre llegó el alivio y la calma que tanto ansiaba, pudo descargas sus miedos y entender muchas cosas, él llevaba razón con lo relacionado a su carrera. Ella era muy buena estudiante de medicina y, cuando no se sentía presionada, disfrutaba mucho en cada clase y práctica, como médico podría ayudar a muchas personas y no era necesario cerrar esa puerta. Podía dividir su tiempo, tomar espacio para la danza y retomar más adelante la universidad, si así lo deseaba, apenas iba a cumplir 19. Cuando le comentó a Isabella su decisión, su madre la apoyó. Otra cosa fue la postura de su padre.

- Estoy de tu lado, lo que decidas hacer será lo correcto – le dijo sonriente.

- Gracias, mamá – respondió ella – Creo que es lo mejor, centrar las energías en una sola cosa y luego retomar la otra – era la primera vez en mucho tiempo que se sentía empoderada, tomando sus propias decisiones y siendo apoyada por todo su entorno.

Cuando le contó a su hermana de su conversación con su padre, ella no lo podía creer, estaba anonadada. No imaginó que su padre tomaría aquella actitud, era evidente que había entendido que recapacitar era su única opción en esa cruzada de no perder a su familia.

- ¿En serio te dijo eso? – preguntó Ivana sorprendida.

- Sí, es como si fuera otra persona. Solo entró, dijo que quería hablar conmigo y lo soltó – explicó.

- ¿Y cómo te sientes? – su hermana le había contado de su episodio la noche anterior con su padre.

- Aliviada – dijo en un suspiro – aunque me afectó un poco verlo como derrotado, es raro, nunca se comporto de esa manera. Siempre ha sido una persona orgullosa y que no da su brazo a torcer.

- Entiendo perfecto. El caso es que papá está a punto de perder lo que más le importa y no debe ser fácil darse cuenta de que todo esto es su culpa por no haber reaccionado a tiempo – la menor hablaba con tristeza, después de todo se trataba de su padre - ¿Crees que esto se pueda arreglar? Dime la verdad, por favor.

- Lo que nosotros pensemos no importa, mamá se venía conteniendo desde hace mucho tiempo y llegó al punto en que no puede más. Así que si él no hace un cambio radical va a terminar perdiéndola – expresó – Ella aún es joven y merece ser feliz.

- Pues sí, pero estaría muy jodido para papá que mamá empiece una vida con otra persona – ambas se miraron con el ceño fruncido, aquella idea era algo que perfectamente podría ocurrir y jamás imaginaron hasta ese momento – Sería un final inesperado.

- Muy, la verdad espero que papá recapacite antes de que sea tarde...

- ¡Dios te oiga! – pidió - ¿Quieres acompañarme al cumpleaños de Virginia? – negó.

- No puedo, he quedado con Juls. Iremos al cine y a cenar – respondió con un pucherito – Quiero compensarla por todos estos días en que no nos hemos visto.

- ¡Eso, aprovecha esta noche y dalo todo! – la ojiazul sonrió - ¡Dale a tu cuerpo alegría Macarena! – bromeó de manera sugerente y le guiñó un ojo.

- Estás loca – respondió riendo.

En su estudio de arquitectura, Isabella continuaba trabajando en uno de sus nuevos proyectos cuando recibió la sorpresiva visita de su esposo.

- Está preciosa la renovación de las oficinas – elogió antes de tomar asiento frente al moderno escritorio de cristal.

- Gracias, ha pasado bastante tiempo desde que la hicimos - Increíblemente era la primera vez en los últimos dos años que se acercaba por allí. Así de distante y fría estaban las cosas entre ellos – No me dijiste que vendrías.