Abandonar

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Eran alrededor de las 9 de la noche. Un chico de cabello color avellana, cabello simulando dos cuernos que estaban algo despeinados debido a que el se solía mover demasiado por la noche. Llevaba una playera color blanca junto unos pantalones de mezquilla negros. No se cambiaba a la hora de dormir debido a que tenia flojera y su ropa le parecía cómoda.

Estaba en la sala de estar leyendo cómodamente una revista que encontró por su cuarto tirada. Las luces estaban apagadas y se encontraba una lampara en la mesa frente al sillón para iluminar su vista. Solo veía las cosas que podría comprar, las cuales no compraría ya que solo estaba intentando entretenerse por esa noche. La única forma de dormir para el era leer, recostarse y esperar a dormir (de lo cual se aburrió y aquello lo dirigió hacia la sala de estar en donde estaba ahora)

Según el, estaban todos dormidos, vivía con sus 3 roommates, tenia ganas de ir y molestar a alguno de ellos (de los cuales solo estaban 2 en la casa), pero no deseaba tampoco despertar a alguien o causar gritos por parte del mas narcisista de ellos.

Mientras tanto. Un chico de cuencas características como sus ojos volvía de su jornada de alcohol. Llego a la casa exactamente a las 11 de la noche, la misma hora en la que Tord seguía en la sala de estar leyendo.

Se escucho como la puerta se abría, y Tom entraba. Su sudadera azul estaba abierta dejando ver su playera gris con un logo de un parque de atracciones conocido en su ciudad. Su pelo estaba desordenado, un horrendo olor a alcohol se desprendía de todo el cuerpo del de cuencas negras.

Captó la atención del de cuernos, le dirigió la mirada en silencio. Tom ni si quiera lo vio, pero si fue hacia Tord con la mirada abajo. Se sentó a su lado, el de cuernos estaba a punto de quejarse por el olor, pero quedo con los ojos abiertos como platos cuando sintió un peso en su hombro.

Era la cabeza de Tom. El que ahora tenia los ojos cerrados mientras descansaba en el hombro del acompañante, el de sudadera roja tragó saliva en forma de nerviosismo, intento alejar sus cuerpos pero la posición en la que los llevo Tom no era favorable. Aparte, su sudadera comenzaba a tener también el mismo olor a alcohol.

- Hey. No te atrevas a dormir en mi - le dio una advertencia. Claramente Tom tampoco pensaba en dormir ahi mismo, aun que estuviera borra no el no era de dormir demasiado y mucho menos cuando estaba pasando una serie infinita de pensamientos (lo cual sucedía en su estado sobrio y borracho)

- No pienso hacerlo. No es como si fueras cómodo de igual manera - Tord se tomo eso como un insulso, y cabe aclarar que a Tord no le gustaban los insultos, mucho menos si eran de alguien como Tom. - Te tengo que confesar algo, Tord - hablo por segunda vez. Told alzo una ceja mientras que la curiosidad lo mataba poco a poco.

- ¿Que es? - preguntó, pues noto como el de cuencas no continuo hablando.

- No me abandones - eso intrigo mucho a Tord. Nunca se había llevado bien con Tom, y en ese momento que esas palabras salgan de la boca de alguien a quien podría hasta llegar a considerar como un rival... Seguro solo eran por que estaba borracho, pero ¿Tanto?

- ¿Por que me dices eso? Eres raro, Thomas - una mueca de confusión se formó en el rostro de Tord. Tom solo quedó callado como si fuera a procesar sus palabras.

- Solo no lo hagas, commie - Tord se molesto por el apodo. Pero no reclamo ni dijo nada, solo seguía queriendo escuchar la razón de por que decía eso. - De alguna u otra forma, estoy prediciendo un muy pronto abandono de tu parte - eso dejo a Tord sin palabras. Por que Tom pensaba eso?

- No digas eso. No pienso abandonarte, ni a Edd ni a Matt, y aun que me cueste difícil decirlo, de alguna forma te aprecio aun que la mayoría del tiempo solo estemos discutiendo - tuvo que admitir la verdad, no quería ser tan seco en el tema del abandono que Tom pensaba.

De ahi en adelante ninguno dijo nada. Tord no se intereso mucho en el tema de que Tom este borracho, pero parecía que Tom no necesitaba mucha atención. Es un adulto. Se puede cuidar solo.

Tampoco quito la cabeza de Tom de su hombro. No le molestaba mucho, pero si tendría que lavar su ropa y bañarse al día siguiente, odiaba el olor a alcohol, pero esta vez lo soportaría, solo por Tom.

...

Ver el harpoon atravesando y por suerte el cual esquivo, lo llenaba de temor. Se escuchaban los ruidos que indicaban que hubo un problema en el funcionamiento de aquel robot gigante.

Ver por la cámara que había fuera del robot, la cara de su rival, el cual solo tenia lagrimas en los ojos y una herida en su brazo izquierdo. En ese momento lo odiaba, sabia que lo que hizo estuvo mal pero.

Quien necesita amigos cuando tiene un robot gigante, con el que logrará la dominación mundial...

Pero, pareciera que su plan se fue al caño, Tord estaba triste. Y enojado. Mas bien frustrado.

Recordó una conversación que tuvo con Tom hace años, cuando Tom le confeso acerca del abandono que iba a tener. Apenas recordó eso, sus pensamientos se inundaron de un solo nombre: Tom.

Le había prometido que no lo dejaría nunca, que nunca lo iba a abandonar ni a el ni a sus amigos. Que aun que pelearan, eso no significara que lo odiaría por completo.

Pero, ahora, lo único que sentía por el era odio.

Y podría afirmar que ese sentimiento era mutuo.



୧⁠(⁠ ⁠˵⁠ ⁠°⁠ ⁠~⁠ ⁠°⁠ ⁠˵⁠ ⁠)⁠୨

Esto también es antiguo, asi que si ven fallas disculpen



Tabaco y Alcohol [TordTom]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora