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-¡Más te vale bajarme de aquí pronto!-. Reclamaba un chico de sudadera azul, el cual soltaba gritos desprevenidos cada vez que era balanceado.

-Si dejaras de gritar tanto…-. Se quejó un chico de traje dominado por rojo y de segundo un morado yendo más al tono oscuro. También pequeños detalles azules. Encubre su cara por una máscara y sus muñecas llevaban una maquinaria que lo hacía lanzar telarañas. Se columpiaba por los edificios de la oscura noche en New York con el “quejoso” en brazos.

-¡Entonces deja de moverte tanto!-. Volvió a quejarse, ahora molestando de mayor manera al de traje.

Después de minutos llegaron a un edificio de departamentos, específicamente al balcón del piso 7 de 10 que tenía. Cayó al balcón y dejó al menor de sudadera en el suelo. Soltó un suspiro escuchando una queja.

-Aquí estamos, chico quejoso-. Sobó su cabeza por encima de la máscara, solo recibió una mirada de enojo y un gruñido.

-Tom para ti, extraño de máscara-. El arácnido soltó una carcajada, dándose la vuelta y preparándose para irse nuevamente.

-Spider Red para ti, ahora deja de andar por las calles a altas horas de las noches cuando en las noticias anuncian un ataque de algún villano-. Le respondió, ahora lanzando una telaraña a otro edificio, se subió al barandal dando un salto hacia delante, cayendo, desapareció de la vista del presente por segundos y después se vio desde lo lejos como se columpiaba.

Tom, el de sudadera, soltó un gruñido mientras que se levantaba con enojo. -No necesitaba su ayuda-. Dijo, mientras entraba al departamento, no le agradaba del todo ese nuevo superhéroe en la ciudad, para nada le agradaba él y su comportamiento burlesco que mantenía en las entrevistas que veía por televisión.

El enmascarado ahora estaba desplazándose por las calles de New York, pero tenía una apariencia diferente. Sudadera roja, peinado extravagante pretendiendo dos cuernos. Comía un hot dog yendo por la dirección contraria de la demás gente. Sintió su celular vibrar en el bolsillo de su sudadera, lo sacó viendo en pantalla el número de alguien conocido: Tom. Le respondió, no podría ignorarlo.

-¿Qué quieres, Tom?-. Le respondió de la forma más desinteresada que podía. Hasta que escucho un sonido de enojo por parte del otro. Sonrió en forma de burla para sí mismo, mientras que solo escuchaba quejas.

-¡Ese nuevo superhéroe es insoportable! ¿¡Quien se cree!?-. Reclamo Tom, casi como si estuviera por desahogarse con él, pero en un camino más de enojo y frustración.

-Si, si. No soy tu psicólogo ahora mismo, sabes…-. Le respondió, en un tono sarcástico conjunto una leve risita.

-¡Agh! Bueno… Hoy prepararé tocino, solo esperaba ver si es que podrías venir-. Ahora le recomendó, emocionando a Tord.

-Cuentas conmigo ¡Ahora mismo voy!-. Dijo con emoción y entusiasmo, colgando la llamada sin dejar que Tom se despidiera.


(⁠ಠ⁠_⁠ಠ⁠)⁠━⁠☆゚⁠.⁠*⁠・⁠。゚
otro one shot viejo 😟

Tabaco y Alcohol [TordTom]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora