11. 𝑬𝒍 𝑺𝒂𝒖𝒄𝒆 𝑩𝒐𝒙𝒆𝒂𝒅𝒐𝒓

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Maratón 3/3

¡Chicos! - Llegó Lucy corriendo al gran comedor con Ginny.

- ¿Qué sucede, Lu? - preguntó Peter.

- Hagrid volvió de la audiencia de Buckbeak.

Todos se apresuraron a levantarse, tomar sus libros y ir con prontitud hacía los terrenos de la cabaña. En el camino se reunieron con Harry, Ron y Hermione. Los dos últimos parecían querer matarse más de lo que era costumbre. Percy miró con curiosidad a la castaña con su expresión inocente.

- Que bello día - comentó Hermione.

- Excelente - murmuró Ron de mal humor -. Si no te hicieron pedazos.

- ¿Pedazos? - preguntó Percy.

- Ronald no encuentra a su rata - explicó Hermione.

- No he perdido nada - replicó el pelirrojo -. Su gato la mató.

- ¡Mentiras!

- Chicos, han visto como su bestia infernal siempre la está acosando. Scabbers se fue.

- Pues deberías aprender a cuidar mejor a tu mascota.

- ¡Tu gato la mató!

- Claro que no.

- ¡Él lo hizo!

Todos se miraron entre ellos con diversión. No estaba seguro de que Crookshanks hubiera matado a Scabbers, lo que sí era seguro era que Hermione mataría a Ron si seguía acusando a su gato. Después de una caminata nada pacífica se reunieron con Hagrid a orillas del lago. Hagrid remojaba sus pies mientras lanzaba piedras para que rebotaran en el agua.

- ¿Cómo te fue en la audiencia, Hagrid? - preguntó Peter.

- Bueno, uno por uno los miembros del comité aclararon porque estábamos ahí - contestó -. Después me tocó hablar y dije que Buckbeak era un buen hipogrifo, siempre asea sus plumas. Y luego Lucius Malfoy se levantó e imaginen que dijo: Buckbeak es una criatura peligrosa que asesinara en un abrir y cerrar de ojos.

- ¿Y qué pasó? - cuestionó Hermione.

- Y luego Lucius pidió el peor castigo.

- No pueden despedirte - dijo Harry.

- No, no me despidieron - Hagrid sollozó -. A Buckbeak lo sentenciaron a muerte.

- Ay no - murmuró la niña.

Lucy se metió en el agua y fue a abrazar a Hagrid que lo aceptó mientras lloraba.

(...)

Annabeth entró en la sala común de Slytherin seguida por Edmund y Blaise que reían divertidos listos para ver el mundo arder. Acababan de hablar con Percy sobre lo que había sucedido con el hipogrifo, Annabeth no podía creer que algo tan horrible le tuviera que pasar a la pobre criatura solo por la imprudencia de su amigo.

- ¿Dónde está Draco? - les preguntó a Theo, Crabbe y Goyle que jugaban a las cartas.

- Ni idea - contestó Goyle.

- ¿Theo?

- No sé - mintió.

- Claro - ironizó Annabeth -. Si le pregunto a Pansy ella no va a saber ¿verdad?

Los tres se miraron entre ellos.

- Annie, no tienes porque matar a Draco - sonrió Crabbe con inocencia.

- No lo voy a hacer, solo quiero hablar.

- Regañarlo - intervinó Edmund.

- ¡No soy su mamá!

La Limerencia entre Mundos || PJO, HP, NarniaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora