Todo se había vuelto risas entre tanto azul. Eran unas enormes carcajadas que Shadow esperaba, se terminarán ahogando.
—Nunca creí escuchar el indicio de una carcajada tuya.— A veces odiaba a Mephiles.
Shadow gruño de nuevo, viendo al cielo la isla flotando, estaba muy lejos, casi se convertia en un punto, pero habían conseguido la aprobación.
—Lo siento, ¡Pero debiste de haberme dejado más en claro que era mi primo!—
Shadow no iba a decir nada, había omitido varios de esos temas, creyendo que Eggman había conseguido su retiro.
—Lamento no haber sido más claro...—
—¡Espera!—
Mephiles busco entre sus púas, tendiendole la esmeralda morada, Maria quedo encantada con el brillo que emana a por si sola.
—El abuelo me prohibía acercarme a ellas, son hermosas.—
—Lo son.— Mephiles y Shadow se miraron, recordando algunos problemas de búsqueda en la que los metía. Dejo la Esmeralda en las manos del hibrido—. No quiero que te agotes, el camino es largo.
Shadow lo vio curioso, ¿Porqué se la daba? El también podía usar el control de caos... A no ser que también pudiera sentir su contada energía y quería que recargara...
Maria se convirtió en la motita y se posó en la veta de se frente. Mephiles puso su mano en su hombro y cerro los ojos. Shadow sólo suspiro y los dirigió hasta Angel Island.
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.—¡Amigos!— Knuckles paso ambos brazos sobre los erizos.
Mephiles cerro sus ojos, sus facciones muy relajadas. Habían aprendido que ese era un gesto amigable que hubiera sido acompañado de una pequeña sonrisa. En cambio, Shadow si tenia una pequeña sonrisa.
—Me impresiona que ambos estén en Angel Island.—
Shadow y Mephiles de miraron, no estaban preparados para ser cuestionados.
—Estoy...— Iba a serle sincero, como con Amy, pero algo los interrumpió.
Los Chaos hacían su característico sonido, emocionados por visitas, algunos volaron hasta Shadow y Mephiles, otros saludaban a Knuckles y otro... Veía curioso al rededor, como si hubiera algo más.
Maria lo veía curiosa, reboloteando a su al rededor.
Los tres antropomorfos fueron jalados de sus manos, querían mostrarles algo.
—¿Qué quieren mostrarnos?— Pregunto Mephiles curioso, les empezó a seguir el paso.
—No se.—
—Eres el guardián, estas con ellos casi 24/7 y... ¿No sabes?—
Ambos erizos vieron raro al equidna, este sólo se alzó de hombros. Tampoco es como si tuviera que ponerles un ojo encima, eran muy inofensivos.
Maria los seguía, curiosa por todos los pequeños seres voladores. Quería acariciarlos, pero no quería meter el pánico y que Shadow tuviera que resolver el problema...
Los Chaos los guiaron hasta la cascada de su jardín, las flores se alzaban como si fuera primavera y los árboles ofrecían su fruta madura.
—¿Es mi imaginación o todo esto se siente más mágico de alguna forma?—
Shadow los vio, ambos asintieron intentando descubrir algún cambio que habían estado ignorando. Los Chaos comenzaron a juguetear entre ellos, invitando a Mephiles y Knuckles en el proceso, ambos se rindieron, eran muy insistentes.
Shadow rió, nada de eso había sido su plan, pero disfrutar un poco de la cascada sería relajante a su cansado cuerpo.
—Olvide que no habías dormido por mi culpa, lamento haber invitado a Mephiles.—
El híbrido negó ligeramente, vio hacia el guardián, estaba nadando lejos.
—Me alegra que te diviertas, has conocido a alguien más.— La sonrisa cansada no paso desapercibido para la chica, pero había cierto alivio en su tono.
Pero tenia un pensamiento que no la dejaba.
—Oye... Shadow...— El nombrado la miro, una oreja se sacudió curiosa—. ¿Qué hay de Sonic?
Los rubí la miraron sorprendido, ¿Qué tenia que ver en todo eso?
—Es que... Yo... No se si entendí algo mal, pero creo que le interesas...—
—... Somos amigos.—
La rubia negó divertida, algo le estaba quedando más en claro.
—No, me refiero a que le gustas.—
Shadow frunció el ceño y su corazón se aceleró. ¿No era eso algo de amigos?
Estaba confundido y el fantasma vio aquello, una risita salio de sus labios, luego hablaría bien con el erizo.
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Una extraña compañía. (Sonadow/Shadonic)
FanfictionAzul. Mucho azul. Un azul tan feliz, tan alegre y radiante. Uno que hacia qué su corazón latiera con ferocidad. Aunque no sólo era un azul... Rojo y negro. Un pequeño rojo y negro que había vivido sólo mucho tiempo y se había cerrado a sus sent...