Respira, Lindsay. Respira. Se lo repetía continua mente en su cabeza.
Luego de la noche anterior Lindsay quedo despierta toda la noche llorando e ideando planes para que Reaper gane.
Le gustaría decir que ideaba planes para lastimar a Coriolanus pero no es así, no le sale ser esa persona.
Empezó a escuchar golpecitos en su ventana y los ignoro esperando que se vayan.
A los dos minutos Coryo se detuvo y entró por la puerta principal.
- Hola, linda - la saludo apenas abrió la puerta.
Lindsay bufo estresada y aguantó la lagrimas que le estaban por salir.
- Hola, rizos - tuvo que fingir y mentir muy bien.
- ¿Estás bien, cariño? - el odio y enojo crecía en el interior de la castaña.
- Si, es solo que...- no sabía que podía decirle - estuve toda la noche despierta. No se como voy a hacer para ayudar a Reaper si no quiere ser ayudado. Además no estoy lista para tener que ver todos los días Los Juegos del Hambre.
- Ohh, Linny. Siempre tuviste un corazón muy grande - a ella se le empiezan a escapar algunas lagrimas y por suerte ya había dicho una excusa bastante creíble sino no sabría como explicar esto.
Coryo se acerca a ella y se apresura a limpiarle la lagrimas y dejarle un recorrido de besos por toda la cara.
- Bien, eso ya no importa. Ahora lo único que puedo hacer es mandarle comida. Vamos - le dolía aún más tenerlo tan cerca, el tenía la capacidad de hacerla olvidar todo.
Y si seguía siendo bueno con ella, aunque sea para manipularla, iba a recaer. Cuando se trataba de Coriolanus no tenía la fuerza para combatir.
Era su Coriolanus.
No. Ahora es de Lucy Gray. Se esforzaba para recordarlo.
- Bueno, entonces vamos. - ella se cambió frente el, ya no importaba. Ya le había dado todo de sí, incluso su cuerpo.
En el camino a la academia Tigris los acompañó para ver el inicio de los juegos y darles apoyo.
- Muchas gracias por venir - le dijo Linny a Tigris.
Coryo, que se había alejado unos mentors, vuelve y la agarra de la cintura a Lindsay con seguridad de que ella era suya. Su Lindsay y estaba seguro que eso no cambiaría.
Tigris observa la cara de su amiga y sabe que en cualquier momento se va a romper por ese contacto.
- Tienen que concentrarse en sus tributos, vayan - les dio un empujoncito y así lo hicieron.
Cada uno se sentó en su lugar que para mala suerte de Lindsay estaban juntos.
- Aliados - ella lo mira al decir eso, le está dando una oportunidad para retractarse, para decirle que no.
- Siempre, Linny - ella suspira y mira al frente.
Lucky Flickerman comenzó la presentación y para decir la verdad era vergonzosas.
De a poco se vio como cada tributo aparecía con un agente de paz.
Los posicionaron en sus lugares y después se fueron metros atrás pero algo no estaba bien.
No comenzaban los juegos. Ya todo estaba en su lugar y deberían comenzar y Lindsay, que fue la primera en darse cuenta, lo vió se levantó de sus silla.
Fue hasta Sejanus, que todavía no lo había visto y le tocó el hombro dándole ánimos. Sabía lo que significa para el.
El contacto con la chica fue como click y lo hizo ver que sucedía.
Marcus, el tributo de Sejanus, su ex compañero de colegio, el único que se había podido escapar de los Juegos el día del bombardeo, estaba ahí. Lo habían colgado.
Colgaron a Marcus y no estaba estaba muerto.
Que castigo horrible.
Sejanus al darse cuenta de esto se levanta enojado de la silla. La agarra y la tira hacia la pantalla, eso hace que Lindsay se sobresalté y Coriolanus se levanta a protegerla porque le daba miedo que en el enojo Sejanus le haga algo.
Pero al contrario, luego de tirar la silla el moreno ve a Lindsay y la abraza con fuerza y se pone a llorar. Ella lo consuela por un rato hasta que la suelta, la castaña le limpia las lagrimas y le dice algunas palabras de aliento que nadie puede escuchar.
Sejanus asiente y antes de irse nos mira a todos.
- Son unos monstruos - les grita enojado - monstruos.
Y antes de que cualquiera intentará hacer una entrevista se va del lugar.
Cuando Coriolanus mira a Lindsay para que se vuelva a sentar en su lugar, esta estaba compartiendo una mirada con Tigris. Una mirada cargada de tristeza y entendimiento.
A la prima del rubio tampoco le gustaban los juegos.
Cuando se escucha la puerta de afuera indicando que Sejanus se fue, Lindsay mira a Coriolanus y el se da cuenta que ella llora en silencio para que nadie la vea.
Verla así lo destroza y saber que después de los juegos va a llorar por su culpa, lo mata.
- Linny - le dice apenas llega a su silla.
- No, ni lo intentes. No voy a parar de llorar - el la mira y asiente para luego poner su mano en la pierna de su compañera dándole ánimos.
Desde el acto de Sejanus la sala quedó en silencio y el ruido del contador era demasiado fuerte.
10 ... 9 ... 8... 7... 6
Coryo agarra la mano de Lindsay.
... 5... 4
El rubio ve a Lucy Gray temblando.
... 3...2
Los nervios estaban a flor de piel.
... 1
Luego de eso varios tributos corrieron hacia e centro haciendo que varios murieran. Lucy Gray corría buscando a Jessup, su compañero de distrito. Reaper agarraba un arma del montón.
El morocho casi mata a la cantante y Coryo le aprieta la mano a Linny.
Pero la tributo del 12 logra salir con vida de ahí junto a su compañero y se esconde en la alcantarilla. Algunos lo siguieron pero no lograron matarlos.
Reaper consiguió un lugar cómodo y acomodó sus cosas. Desde ahí podía ver todo y nadie se metería con el,
Cundo todo se tranquilizó, Lindsay miró al rededor y quedaban 12 compañeros lo que significaba que quedaban solo 12 tributos.
Estos juegos iban a ser rápidos.
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Bad for business- Coriolanus Snow
FanfictionLindsay Zital es hija de un empresario muy reconocido en el Capitolio, Oliver Zital, durante los días oscuros su riqueza no se vio afectada por lo cual era una de las familias más poderosas de Panem. Oliver Zital era muy buen amigo de Crassus Snow h...