Pansmione [One-Shots].

Say anithing

Dentro de Hogwarts, la gran casa de estudios preparatorios, donde solo los privilegiados y personas excepcionales pueden asistir a estudiar, se pueden encontrar prototipos de alumnos muy bien marcados.

Las serpientes: hijas de las grandes fortunas, que asistían al colegio por una cuestión de tradición familiar, nunca les faltaba nada, la mayoría, destacaban sin necesidad de buscarlo. Gente estirada, sin gracia y unos egocéntricos de primera; son las características que enumeran quienes no les conozcan de verdad.

Las águilas eran las matadas del colegio, la mayoría si bien eran de familia acomodada era más común que estos entrarán por méritos académicos. Unos mamones con complejo de superioridad que no pueden sacar la mirada de sus libros, era, de nuevo, como la mayoría se refería a este grupo cuando les eran desconocidos.

Los tejones eran los que se podían considerar como un grupo boy scouts, la mayoría de ellos habían ingresado por recomendación directa de las distintas escuelas a las que asistieron, unos cuantos incluso llegaron a ser apadrinados por otras familias o docentes; eran quienes siempre eran seleccionados para dar la bienvenida a los recién llegados a la escuela o para dar la cara frente a las cámaras cuando una entrevista se buscaba.

Por último los leones, la gran mayoría becados que sus aptitudes habían conseguido colarse en tan antigua y prestigiosa casa de estudios, eran bastante orgullosos, algo normal tras haber conseguido un puesto de entre los miles que solicitaban el puesto.

Existía cierta tradición de competencia odio entre las serpientes y los leones que surgía desde los motivos más clasistas posible de emplear. Si bien las causas de conflicto se volvieron diferentes tras tantas generaciones, las luchas se siguen manteniendo.

Durante la generación del 2019—2022 algo muy particular se vivió entre dos alumnas que se podían considerar polos opuestos como el aceite y el agua.

Pansy Olivia Parkinson era la única hija de un matrimonio de antiguo linaje, una familia con mucho dinero e influencias en toda Europa. Solo en la media herencia que recibiría la chica cuando el momento de sus padres llegará había suficientes ceros para financiar la vida de tres generaciones y conservar suficientes fondos de reserva para ella misma. De apariencia pálida, delgada como pocas, remitía a la imagen clásica de lo que se consideraba belleza en los tiempos de antaño; quizás no era en exceso alta pero su andar siempre firme y recta compensaba esos pocos centímetros que faltaban. Siempre mantenía sus cortos cabellos peinados a la perfección, su maquillaje era discreto, no más de lo necesario para resaltar sus ojos y labios. Lo que era motivo de gran envidia era su buen gusto en ropa, cada día llegaba con un conjunto diferente al anterior, apropiados para las ocasiones específicas y que transmitían esa aura señorial que remitía a los tiempos de la realeza. En lo académico era una alumna perfecta, de cuadro de honor, los profesores le tenían en alta estima a tal punto que la recomendaban como tutora personal para quienes necesitaban un poco de ayuda adicional para pasar las materias.

Por otra parte, estaba Hermione, alumna becada que fue la número uno dentro del examen para aplicar a las becas. Desde el primer día se mostró como una chica atenta a las exigencias de la escuela, siempre buscando ser la primera en levantar la mano para contestar. Su familia era de zona norte de Inglaterra, gente trabajadora que se rompieron la espalda por darle lo mejor a su única hija. Las actividades extracurriculares eran donde más se mostraba, participando en el equipo femenil de fútbol y dentro de las artes era buena tocando el bajo. Todo a su alrededor podría aparentar las vibras de ser la "chica buena" de una película americana, pero eso era solo para quienes no la conocían bien.

Ambas chicas se conocieron de la mejor forma posible para el inicio de una amistad que cambiará en cuestión de días.

Una noche templada de finales de verano. Pansy había ido a una gala benéfica por orden de sus padres pues tenían que presentarle a un prospecto de esposo, ese era el fin de todas sus salidas en familia. Cuando ya estaba muy avanzada la noche y Pansy estaba que se desmallaba del sueño sus padres le sugirieron irse caminando si tanto le disgustaba la velada.