Capitulo #8
Después de ir a la cafetería con los chicos y a acompañar a Nadia al super mercado a comprarse unos vestidos y trajes de baño para ir a la fiesta de la playa, llegue a casa demasiado cansada y lo peor de todo es que tenía que estudiar pero eso lo hago después. Me di una ducha caliente después me puse el pijama y al final me metí en la cama viendo una película.
Mientras iba por la mitad de la película alguien toca la puerta de mi habitación. Le digo que pase y la puerta se abre lentamente dejando ver el cabello pelirrojo de mi madre.—Si, mi cabello es igual al de ella—Sus ojos dorados y mis ojos verdosos se encuentran.
—¿Puedo pasar?— me dice con una sonrisa media, asiento.
Me parece extraño que mis padres estén tan temprano en casa nunca están aquí a estas horas de la noche.
Nos parece extraño Yess, nos parece.
Tienes razón conciencia “nos parece”
Mamá se sienta en el bolde de mi cama mirándome fijamente con una sonrisa en la cara.
—¿Cómo te fue hoy en el instituto Yessica?—Vale. Esto está muy pero muy raro, mamá nunca me pregunta esto.
Solo le voy a seguir la corriente.
—Bien, supongo.
—Me alegra oír eso... Yessica quiero hablar contigo de algo. Algo entre madre e hija.
—Vale, soy toda oídos mamá. Pero si es sobre la discusión de esta mañana, lo siento pero no me apetece habla de ello.
Me acomodo mejor en mi cama y miro a mi mamá con la mirada neutra.
—Pues Yessica si es lo de esta mañana. Te vengo hablar de ello.
Lo sabía.
—Mira mamá no estoy para tus consejos y todo eso...
—Yessica soy tu madre y tengo el derecho de hacerlo.
Me enfado y me levanto de mi cama quedando en un extremo de distancia de mi madre.
—¿Derecho? ¿Vienes a decirme que tienes un derecho? ¿Derecho, de qué? Tu único derecho es querer a tu única hija y es lo menos que estás haciendo mientras estás más pendiente de tu trabajo señora diseñadora.—le espeto enojada. Ya, listo llegue a mi límite.
—Yessica soy tu madre y tengo derecho de hablar contigo para que dejes el escándalo que tienes. Y claro que te quiero, te quiero mucho porque soy tu madre y quiero lo mejor para ti. Mi trabajo es importante también porque es lo que me gusta hacer y tú tienes que entenderlo.
Niego repetidas veces
—¿Que quieres lo mejor para mí? Venga ya mamá hoy estabas de acuerdo con papá para casarme con un maldito desconocido. ¡Ni siquiera tengo pensado casarme a los Diecisiete años, por el amor de dios!—mi madre se levanta de la cama y queda de pie con los brazos cruzados. Mirándome enfadada.
—Me bajas el tono de voz Yessica porque soy tu madre no lo olvides.
—No lo olvido. Pero lo que creo que sí olvidas es el único derecho que tienes de madre y es querer a tu hija mamá.—la señaló con un dedo.—Y quiero que le digas a papá que ni piense presentarme a un maldito hombre porque no lo voy a aceptar. Y que de una vez por todas se acuerde que soy su hija no una cosa que puedan comprar, y esto también va para ti también mamá...
Mi mirada se cristaliza con las lágrimas que salen libremente recorriendo mis mejillas. Los ojos de mi madre también pero está solo baja la cabeza y sale de mi habitación.
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La Persona Correcta
RomanceYessica Morgan, no tenía planes de enamorarse después que paso por una relación tóxica que la dejo con el auestima muy bajo Quien diría que en una fiesta, en una pelea entre su mejor amiga y su novio iba a conocer a un chico guapo y egocéntrico que...