Kyōdai

27

—Yusho Sakaki es el culpable... Ese traidor...

Recuerda que antes de la explosión su padre no deja de culpar a Sakaki por lo que estaba ocurriendo, y entonces el mensaje se cortó de manera abrupta, un estallido y el retumbar en el suelo le hizo caer de nalgas en el suelo.

El bunquer que su padre armo en verdad resistió aquel caos, pero no lo soportaría lo suficiente, por ello una grabación de voz le dio indicaciones para entrar en la capsula, la cual no sabía que lo llevaría al pasado.

Reiji no estuvo muy seguro cuanto tiempo retrocedió en el pasado cuando estuvo al pendiente de las noticias en la gran pantalla al caminar unas cuadras de donde apareció. 

Ciudad Maimi en la costa de Japón, el inicio de la tecnología de la visión solida antes de que Sakaki y Akaba hicieran grandes aportaciones, por lo que era seguro que estaba unos veinte años atrás.

Dejo de teclear cuando observo por la pantalla que da a la puerta en la habitación de Zarc verlo salir. No creía que alguien más aparte de él sobrevivieran, muchos menos que estuvieran en un tiempo y espacio semejantes, pero era la única persona con la cual podía contar.

—Te ayudaré... Pero no por la razón que piensas. El señor Yusho no creo que sea el culpable de lo que sucedió –aun si aquello podía causarle problemas con Reiji, este tendría que soportar a menos que tuviera a alguien más con quien contar, lo cual no era así —¿Y bien, por donde hay que comenzar?

Agradecía que aquello quedaba solo entre ellos dos, de lo contrario no tendría cara para admitir que una chica le venció, y no es que aquello fuera malo, al contrario, fue muy divertido y satisfactorio, la lucha y la velocidad, aquel encuentro entre sus monstruos y la habilidad con la cual Rin se manejaba era algo que no había estado prestado atención del todo.

—¿Entonces? –Rin se saco el casco liberando aquella cabellera y verle —¿Dime que fue lo que sabes?

Yugo quedo en verdad impresionado y no podía evitarlo, sentía el calor en las mejillas y como el pulso se aceleraba ¿Amor? ¿Encanto? 

Antes se habría burlado de ello, pero ahora sentía que aquello pasaba de él —¿Quieres participar conmigo en la carrera por equipos?

No era lo que esperaba escuchar, menos cuando se lució en todas, o la mayoría de sus formas para poder atraer al chico sin intensiones más allá que no fueran entre ellos. Yugo no estuvo ni por enterado de porque Rin le había golpeado y dejado en el suelo.

19/01/2024