Diario de un Escritor Enamorado //Ranpoe//

06/01/24

SÁBADO 

No escribo desde el año pasado juas juas

Sigo castigado, pero pasamos una navidad increíble. Chuuya nos invitó a su casa a intercambiar regalos. La pasamos bien.

Es increíble que ya sea seis de enero, es como para no creer.

A Chuuya-kun le ha crecido el cabello y se lo recoge en una pequeña cola baja. De navidad le dieron un abrigo amarillo que no se quita nunca. A mi me dieron una cámara, para tomar fotos. En año nuevo fuimos a una feria que hicieron en Yokohama y le tomé una foto mientras me tomaba una foto. Él aún no ha querido pasármela, dice que le quiere hacer una copia. No se si es que quiere convertirse en fotógrafo de grande, aunque tampoco es que me importe mucho.

Al final del año conseguí cumplir mi meta de los 50 libros. Este año voy por 100 libros. Hay que ver si soy capaz.

Hubo un par de competencias en la escuela, tipo festivales de invierno. Ranpo, Dazai y yo quedamos de últimos en absolutamente todo, desde las pruebas de flexibilidad hasta las de velocidad y resistencia. Chuuya, en cambio, lo hizo todo muy bien y quedó en primer lugar en todo.

Y se suponía que en la semana de navidad había un viaje a Sapporo a ver el festival de nosequé de nieve, pero ni Ranpo ni yo pudimos ir porque estamos castigados.

Dazai y Chuuya si fueron y se la pasaron genial. Qué injusto.

Algo bueno que sucedió es que me devolvieron el teléfono y pude llamar a Sigma para desearle feliz navidad y feliz año nuevo. Aunque fue una llamada corta y no pudimos darnos demasiados detalles, le prometí que volvería en vacaciones para visitarlo. Entonces podría darme un buen tour por Osaka, y quizás enseñarme el templo en el que trabajaba (eso es trabajar o cómo se le dice? ¿Servir?) como sacerdotisa Miko.

En otras noticias, ¡pronto será mi cumpleaños! Me emociona poder pasarlo con mis nuevos amigos. Aunque quien sabe, tal vez pase encerrado en mi cuarto el día de mi cumpleaños porque sigo castigado.

En fin, creo que eso sería todo. Estaré reportando mas cosas en... Digamos el martes.

Adiós!