Capítulo 1:

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Hola corazones de fuego, antes de comenzar éste viaje quiero aclarar ciertas cosas.

Primero que nada ¡No romantizar comportamientos tóxicos o violentos de los personajes solo por ser atractivos! Como autora, me veo en la obligación de aclarar esto.

Segundo, soy argentina, por lo que es probable que encuentren ciertos modismos en las narraciónes que se me pasan por alto al momento de editar; suplico que me avísen en los comentarios para garantizar una lectura mas amena.

Tercero: considero que uno siempre está aprendiendo e intentando mejorar, por lo que siémpre estoy abierta a recibír comentarios constructivos. Inténto capacitarme y mejorar día a día, por lo que sus comentarios son recibidos con luz y mucho amor, solo pido que sean respetuosos.

Cuarto: No apoyo la violencia entre lectores. Cualquier comentario de caracter tóxico o violento entre lectores va a ser reportado de inmediato. Ayuden a generár un espacio de calidéz entre lectores que podemos coincidir o no en ideas, pero recordemos  que es el amor por la lectura el que nos une.

Si sos lector, autor o ambas, no olvides seguirme en mi cuenta de instagram (valen_escritora), ahí no solo súbo novedades, imágenes y cosillas sobre mis libros, soy estudiante de literatura por lo que súbo consejos de escritura, edición y maquetación, como así tambien estoy trabajando en un espació de recomendacion para libros sugeridos por lectores.


Ahora si, muchas gracias por tu tiempo, espero que la historia sea de tu agrado.

Cariños, Valentina M. Laborde.

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Selene Jacket se aferró a la daga que apretaba con fuerza entre sus manos, intentando concentrarse en la plata de las armas y no en el frio que clava sus huesos.

El bosque era frio, siempre lo era, pero aquella noche en particular el frio parecía cubrirlo todo con mayor brutalidad.

Selene ignoro el frio, como solía hacer siempre. Ella era excelente ignorando el mundo a su alrededor mientras se enfocaba en una sola cosa. Su presa.

Era esa una de las cualidades que la coronaban como la mejor cazadora y asesina de toda la región.

Y también era el causante de que ella estuviera allí en un primer lugar, embarcada en aquella misión. Asesinar al alfa de la manada Crescent.

Los otros cazadores habían temblado ante la mera mención de la manada Crescent, la más poderosa de todas. Era una locura meterse con un miembro de esta, pero asesinar al alfa era una cosa totalmente desquiciada. Nadie cuerdo se atrevería a eso.

Pero Selene no era en absoluto una chica cuerda.

>> ¿Dónde estás? << pensó la cazadora, mientras se obligaba a mantener el castañeo de sus dientes quietos y silencioso. Bien sabia que cualquier lobo a un kilometro a la redonda sería capaz de escucharla.

Una mancha blanca cruzo entre los pinos y Selene supo que debía moverse.

Con pasos agiles y silenciosos ella comenzó a seguir al enorme lobo, cuyo pelaje blanco parecía relucir con mayor intensidad ante la luz de la luna.

La bestia era hermosa, la criatura mas majestuosa que ella jamás hubiera visto. Pero también era un alfa y un asesino cruel, despiadado y sin corazón.

O al menos es lo que los monjes siempre repetían durante su entrenamiento. La verdad es que Selene nunca había dejado a una de esas criaturas vivas el tiempo suficiente para comprobar su naturaleza, y esta vez no sería la excepción.

Esclava del AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora