🏰🚂Capítulo 14🚂🏰

526 72 21
                                    


Hermione guío a los gemelos hacia el interior de la casa, iba a designarles una de las habitaciones superiores puesto que eran las más grandes de la casa, pero creyó prudente que ellos durmieran en el piso de abajo, así estarían más cerca del sótano.

Caminó hacia la única habitación que tenía la planta baja, abrió la puerta y dejo ver una recámara bastante amplia decorada en tonos grise, ya después ellos podrían redecorar todo, suponía que dentro de poco la habitación estaría pintada y adornada con elementos de Gryffindor, de eso no tenía duda. 

—Bien, aquí van a dormir— Se hace a un lado para dejarlos pasar. 

—¿En verdad está gran habitación será nuestra?— Pregunto George, que fue el primero en entrar y explorar.

—Arriba hay habitaciones más grandes, pero creí que les sería más cómodo dormir en la planta baja debido a que el sótano está aquí cerca— La castaña se volteo a verlos y sonrió. —¡Pueden acomodarse! Las pertenencias de ustedes que quedaron en la vivienda Weasley serán traídas aquí por Yellow luego del desayuno, se que no querrán perder ninguna de sus creaciones, ¡En fin! Por ahora traten de conocer la casa, adaptarse y todo eso, yo tengo un asunto que atender, así que no podré unirme a ustedes en el desayuno, quizás me verán hasta entrada la noche... posiblemente...—

Fred y George observaron a la chica, aunque era menor que ellos parecía ser autosuficiente, porque habían notado que en la casa no había ninguna pertenencia de un adulto, lo que les hacía sospechar que ella tal vez era huérfana o sus padres trabajaban mucho, de ahí que estuviera sola con sus elfos domésticos.

—Te agradecemos mucho está oportunidad— Dice Fred.

—Si, nadie había hecho algo así por nosotros antes, darnos la oportunidad de tener un ambiente en el cual poder experimentar— Secundo George.

—No tienen que agradecerme nada, hago esto porque veo verdadero potencial en ustedes y se que algún día podrán tener su tienda de bromas, solo tienen que seguir esforzándose y en un par de años todos en el Reino Unido, no, ¡En todo Europa! ¡Sabrán quienes son Fred y George Weasley!—

En el rostro de los gemelos apareció una mueca, la idea de ser reconocidos en todo el país los llenaba de dicha, pero por alguna razón el que los relacionaran con el apellido Weasley les daba un mal sabor de boca.

No es que no amaran a su familia o algo así, pero ellos no veían futuro en la creación de implementos para las bromas, la únicas dos personas que siempre los apoyaron en su sueño a pesar de lo loco que era, fueron Bill y Charlie, pero cuando ellos se fueron del hogar Weasley, empezaron a ser tratados como niños revoltosos que jamás lograrían nada en la vida y eso llevo a que su madre pensara que habían robado 11 galeones, 5 sickles y 9 knuts, aún cuando eso es lo que habían ganado y ahorrado por las ventas de sus implementos de bromas en los últimos dos años escolares, podía no parecer mucho dinero, pero lo era para ellos, era un pequeño paso hacia su meta de conseguir 1000 galeones para rentar un lugar y poner su tienda de bromas.

Pero para su madre ellos eran unos ladrones.

—A decir verdad... Nosotros queríamos...— Empezó George.

—De ser posible... ¿Dejar de portar el apellido Weasley?— Finalizó Fred.

—...— La castaña no se espero aquello, osea, si había pensado en que los gemelos se deshicieran del apellido "Weasley" pero no espero que fueran ellos quienes hicieran la proposición, suponía que se debía a lo vivido con Molly, la verdad, poco le interesaba la razón por la cual los gemelos quisieran deshacerse del apellido que se les dio al nacer, ¡Solo hacia las cosas más fáciles para ella! Porque ahora no tendría que convencerlos de nada. —Si eso es lo que ustedes quieren, puedo ayudarlos, pero tendrán que hacer un viaje conmigo a Gringotts—

Hermione Granger: Tenebris EquitemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora