El Orígen De Mí Destino

El Comienzo De La Corté Militar

Tomando sus respectivos asientos, mi lado izquierdo es ocupado por mis contradictores y aquellos que tienen el poder de determinar sobre mi vida.
No puedo hacer nada más que permanecer quieta, observar y apretar mis manos, que se empañan poco a poco de sudor.

Dirijo y fijo mis ojos en los únicos que no me provocan malestar. A mi lado derecho están aquellos que puedan estar obligados y solo sigan órdenes. Sin embargo, han convivido conmigo directa e indirectamente y saben relativamente todo sobre mí: la cantidad correcta de mis pasos dados en la escuela como en casa, mi gusto musical, mis alimentos favoritos. Más que mis cuidadores, son mis sombras siempre por encima de mi hombro, observando detalladamente todo movimiento que haga. No mentiré al decir que es agobiante, pero si comparamos esta situación a la que viví en esos meses en la correccional, estoy en el paraíso, aunque dudo que así se sientan las centenas de personas que envié allí. Me pregunto si mis cuidadores, al igual que Sara, habrán desarrollado alguna pizca de compasión o de bondad sobre este desecho adolescente.

El único de pie y por lógica encabezando la enorme mesa, el general Castañeda da comienzo a esta tortura

— Buenos días, tenientes generales, coroneles, capitanes, comandantes, tenientes y demás integrantes de las Fuerzas Militares portuguesas, bienvenidos sean y también bienvenidos al general Martínez y al comandante Sánchez...

Mirándolo de costado, el general Martínez quien me ha mantenido en su campo visual desde que llegó, está serio, pero al igual que la última vez que lo vi en persona, su rostro sigue reflejando amabilidad

—... Como fue estipulado hace cuatro años en la asamblea general de ambos países, cada noventa días se realiza una evaluación de control sobre la señorita Daniela Walker, debido a su pasado como combatiente del extinto Grupo Patriótico Norte de Colombia. Este grupo se dedicaba a actividades como atentados en edificaciones públicas y privadas, desapariciones forzadas, extorsiones, tráfico de armas y narcotráfico, con presencia en países como México, Ecuador, España, Brasil, así como en ciudades como Londres y Nueva York...

Vaya discurso, me dan ganas de levantarme y aplaudir al general por recordarles a todos por qué me tienen que odiar. No obstante, me confundo, no entiendo la necesidad de volver a recalcar nuestros actos, en las anteriores auditorías no lo mencionaron ni una sola vez.

¿Por qué es distinto ahora?

¿A qué se debe?

¿Acaso es porque están envejeciendo y al secarse sus cerebros se ven obligados a recordar?

El aumento de mi ácido gástrico me hace apretar con fuerza mi estómago al sentirme tan observada. Son muchos los ojos que tengo encima. Mi pierna comienza a moverse con impaciencia, al igual que me impaciento por la ausencia de Sara, está a varios metros de mí lanzándome besitos. La vergüenza que me provoca calma mi ansiedad.

El carraspeo de la garganta del general Castañeda hace eco en la sala al quedarse sin habla, toma el vaso de agua y le da un sorbo

—... Al tomar la decisión de desertar del grupo criminal y colaborando con información importante, se tomó la determinación junto al gobierno colombiano de traer a la señorita Daniela Walker al país — menciona.

Me tapo la boca para esbozar una sonrisa sarcástica. Claro que estuvieron de acuerdo en traerme aquí, ¿quién querría ver todos los días a la persona que les hizo pasar por un infierno?

— Un compromiso de todos para ayudar a su formación e integración a la sociedad, ahora le pido a cada uno de los encargados de la formación de la señorita Daniela dar sus respectivos informes sobre su desempeño y comportamiento de los últimos noventa días — concluye.