Friday i'm in love [Minwon/Meanie]

15

Una parte de Wonwoo se desepciono cuando Mingyu fue a su mochila para sacar su celular y revisar la hora.

—De verdad no quería romper con la atmósfera, pero estoy castigado y tengo que darle una buena excusa a mi padre de porque sigo en la escuela.

Wonwoo asintió resignado. ¿Cómo para que quería que Mingyu cerrara la puerta con llave?

—¿Por que estas castigado?
Le preguntó el presidente.

—Nada importarte, solo por un citatorio.
Dijo Mingyu sin darle mucha importancia, mientras escribía un mensaje a su padre, inventando una excusa de que se quedo un rato en la biblioteca.

—¿Un citatorio? ¿Que hiciste?

—Pase el límite de faltas… y ya.

Mingyu volvió a su lado; —Ahora si ¿En que nos quedamos?
Obviamente dijo eso para poder continuar con el beso.

«En que ibas a cerrar la puerta con llave». Wonwoo se sonrojo, no entendía porque sus pensamientos vagaban hasta llegar a eso. —No lo se…—. Rápidamente cambio de tema. —¿Para que me pediste que trajera el paraguas?

Mingyu se volvió a levantar para revisar otra vez su celular.
—Ah, es cierto. Lo había olvidado.

Solo miró la hora, aún quedaba tiempo. —Es una sorpresa, tenemos como 10 minutos mientras.

—¿10 minutos?

—Si, es solo que… bueno, quería que todo esto fuera perfecto. Primero estaba desanimado porque escuche que el auditorio estaba siendo usado, y luego el clima no ayuda. Se supone que tenía que llover hoy.

«"Perfecto"»
—Mingyu no necesitamos que llueva.

—Si, las circunstancias en las que nos conocimos son muy específicas, por eso lo hacen todavía más memorable… quería que todo esto se pareciera.

—¿No crees que estas circunstancias también son memorables? Para mi todo esto fue y sigue siendo perfecto.
Wonwoo le acuno la mejilla. Y Mingyu enseguida le cubrio la mano con la suya.

—Yo también me desanimé cuando hubo un cambio en los planes, no es el lugar donde nos conocimos, tampoco es el ambiente o clima que había cuando lo hicimos. Pero… es memorable porque en este salón, me entregaste una carta y me enseñaste la melodía mas hermosa de todas—.
Le dijo Wonwoo de una forma que Mingyu escuchaba su voz como miel escurriendo, tan suave y dulcemente que podía sentir el dulzor en su boca.

Ahí estaba una vez más el hechizo de sus miradas.

—Lo que hace memorable ambas circunstancias, eres tú.
Terminó por de decir Wonwoo.

Él había sentido exactamente lo mismo que Gyu, pero al final todo lo que importaba eran ellos.

Incluso era un cambio que contrasta, pues aqui en la intimidad del salón de música, donde solo ambos tienen las únicas llaves que hay para poder entrar, frente a un pequeño piano, en el mismo apretado asiento, con los debiles rayos del sol de otoño entrando por la ventana, ambos se habían declarado su amor.

Mientras que el día que se conocieron, un Mingyu mojado y con rodilla raspada, observaba desde los asientos del enorme auditorio, a un Wonwoo que se negaba a abrir los ojos y a tocar para los demás. En un lugar donde cualquiera podía entrar, sin intimidad, en donde Wonwoo y Mingyu estaban muy lejos uno del otro, en dónde además de la musica estaba el ruido fuerte de la lluvia que chocaba en la ventana.

En cambio aqui, los latidos de los corazones casi se podian oir.

—Para mi, lo haces tú.
Confesó Mingyu.