Friday i'm in love [Minwon/Meanie]

25

Para la mañana del día siguiente, Mingyu no había dormido muy bien, pero aún así, se levantó un poco más temprano de lo acostumbrado. Pues tenía que ver a Wonwoo y ambos tenían que hablar de lo ocurrido.

Cuando Mingyu paso a la cocina a tomar una manzana para salir casi corriendo de la casa, su papá lo detuvo en la puerta. —Espera.

—¿Qué?
Pronunció Mingyu con la boca ocupada.

—Se que llevas prisa ¿Te llevo?

Mingyu se desconcertó por la oferta de su papá, si acepta, puede llegar antes y esperar a Wonwoo en la puerta. Aunque si toma el autobús puede que se lo encuentre ahí. Pero también puede que no.

Aún asi, pensandolo bien ¿Quien rechaza un aventón?

—Si, gracias.

Los dos salieron de casa, y subieron al auto.

—Que extraño que me lleves a la escuela así de la nada...
Dijo Mingyu desde el asiento de copiloto, pues normalmente su papá lo llevaba solo si se le hacía muy tarde, o el mayor debía ir a la escuela por algún asunto.

El viaje comenzó.

—¿No puedo llevar a mi hijo de vez en cuando?

—No me quejo si decides llevarme más seguido.

Mingyu no bajó la guardia. Sospechaba que su papá le quería decir algo, quizá regañarlo o algo así.

Pues, así como Minho conoce muy bien a su hijo, Mingyu conoce muy bien a su padre.

—No te hagas ilusiones. Por cierto. Hay algo en la guantera para ti-.

Mingyu abrió la guantera. Revisando que podía ser el regalo de su papá. Había una bolsa de papel no muy grande. Supuso que ese era el regalo.

Y si.

—¿Qué...? ¡¿Por qué me das esto?!
Preguntó Mingyu completamente rojo. Ya que al abrir la bolsa encontró una tira de preservativos.

—Porque ya tienes novio...

Mingyu interrumpió a su papá. —¡Ya sé que tengo novio! ¡¿Pará qué me das esto?!

—Ya sabes para que, pero aún así, te explico...

—¡NO! ¡Si sé usarlos, ya...!
Dijo Mingyu, y después se dió cuenta de lo que dijo.

Minho aprovechó un alto, para mirar a su hijo. Aunque Mingyu fuera muy cercano a su papá, había cosas que no le contaba.

En la cara del mayor no había sorpresa, al parecer a Minho no se le hacía de otro mundo que su hijo ya haya tenido relaciones. «Es parte de que haga su vida» además Mingyu ya casi entraba a la universidad, no era ningún niño.

—Bájame aquí.
Mingyu sentía toda la vergüenza en él.

El camino continuó.

—Ya casi llegamos. Y aunque te esté dando este regalo, sabes las reglas de la casa.
Advirtió el mayor.

—Ya sé.
«De todas formas mi novio esta enojado...» Mingyu suspiro. Darle uso al regalo de su padre era lo de menos, el moreno solo quería volver a ver la sonrisa de Wonwoo. No había tiempo de pensar en tener sexo si ni siquiera puede ver a Wonwoo.

—Y tampoco te los estoy dando para que los uses en la escuela. Hay lugares y momentos adecuados-.
Dijo Minho de una forma tan natural que Mingyu sintió escalofríos.

Su padre sí era un caso especial. Pues Mingyu no se imagina a los papás de sus amigos en esta situación.
Hablando tan calmados de sexo seguro, con su hijo el cual tiene un novio.