Capítulo 2

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—¿Quién lo invitó?

—Nadie. Llegó justo después de nosotros, viene con dos alfas. —Su amigo tomó un trago del whisky que había sobre la mesa.

Todos estaban sentados sobre una gran mesa en forma de luna, los sillones eran de un color rojo de gamuza, la mesa tenía ese tono color dorado y en la orilla tenía algo de negro, sin mencionar el centro de mesa con flores blancas.

Las luces blancas hacían que todo el bar se viera casi oscuro, haciendo que fuera muy difícil pasar entre la gente. La música estaba a todo volumen, tenían que gritar para poder hablarse entre ellos, pero por suerte habían escogido un lugar en donde la música casi no se escuchaba.

—Pareciera que te está siguiendo —habló SeokJin en forma de burla, —no ha dejado de verte desde que llegó.

—Quizá es solo coincidencia de que esté aquí ¿no creen? —comentó la alfa. —Sweet es uno de los bares más populares de la ciudad, los turistas suelen venir aquí, incluso famosos.

TaeHyung negó.

Adhara rodó los ojos.

—Eres un omega muy necio, TaeHyung.

—Lo sé.

La pelirroja se limitó a ver como las personas bailaban. Le dieron unas inmensas ganas de ir y buscar a Kyong, el omega que la traía completamente loca. El omega estaba bailando con otro omega, quien desconoció en segundos.

Kyong movía un poco sus caderas, se dejaba llevar con el ritmo de la música, parecía disfrutar de ese momento. En cuestión de segundos, el omega miró a la alfa, quien le regaló una de sus mejores sonrisas.

Kyong estaba provocando a Adhara con sus movimientos.

En pocas palabras, Adhara estaba disfrutando del momento.

—Deberías de ir con él. —susurró Jimin en el oído izquierdo de la alfa.

—Me gusta verlo bailar.

Pero también quiero bailar con él.

—Oh vamos, se que te mueres por bailar con él. —le dio una pequeña sonrisa.

—No sé bailar.

No mentía, era pésima bailando. Siempre estaba pisando a los demás o se caía, tenía dos pies izquierdos.

—Entonces dile que te enseñe.

Mentiría si dijera que Adhara no pensó en eso. Quería quedar bien con Kyong, quería gustarle tal y como era y no fingir en ser alguien más. Pero también tenía miedo, miedo de no ser lo suficientemente buena para él.

—Iré.

La alfa se bajó de los asientos en donde estaba con sus amigos, caminó hasta llegar a la pista.

En el otro extremo del bar estaba JungKook, con la mirada fija en TaeHyung, seguía cada movimiento que el omega hacía.

—¿Cuánto tiempo crees que esté en la ciudad? —preguntó Jimin después de un tiempo.

—Realmente no sé de cuanto tiempo es el contrato que firmaron.

—Apuesto que es de un año.

Ambos omegas miraron a SeokJin, quien estaba comiendo una barra de chocolate.

—¿Qué? los socios de tu padre siempre se quedan un año y después trabajan por Skype o correos —dice. —¿Pensaste que se quedaría más tiempo? —asintió. —No es por ser una mala persona, Tae ¿Pero cómo crees que él se quedara después de que lo trates mal?

El secreto de tu aroma | kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora