NOCHE 16

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"Mikoto, no quiero casarme"

"Ya compré un anillo, no puedes decir que no"

"Mikoto..."

"Si me vas a rechazar hazlo en el altar... E incluso ahí no estaré de acuerdo."

Mikoto estúpido…

No podía decidir sobre nadie, no podía obligar a alguien a hacer lo que no querían por más que quisiera tomar sus decisiones.

Detestaba al Mikoto joven que pensaba que la clave era insistir tanto hasta que le dieran lo que pedía, aquel que le decía a la gente lo que quería que pasara y todo estaría resuelto.

Odiaba a su pasado que creía que creía poder moldear todo a su gusto. Pero no.

El Mikoto actual solo era responsable de sí mismo y de sus propias acciones, sin poder decidir sobre los demás.
Si Minato  quería o no tener a su bebé era decisión suya y nada más. No de Mikoto.

¿Entonces porque mierda era tan difícil mantener su regla?

No tenía que preocuparse por el bebé de Minato, Minato tenía que preocuparse por él, y tampoco tenía que preocuparse por Minato, pero ahí estaba teniendo un estúpido colapso mental mirando la ciudad nocturna.

De pronto el aroma de Minato le dio el aviso de que estaba frente a él, ni siquiera lo escuchó o lo vio, tan solo su fragancia llegó hasta él.

Siempre olía igual.

    — Será mejor que tengas una vaca aquí escondida o voy a pensar que me mentiste. - dijo el omega manteniéndose de pie.

            —Lo siento.- murmuró Mikoto—No puedo decidir por ti. Cualquiera que sea tu decisión estará bien.

    —¿incluso si decido no tenerlo?

El silencio cayó de golpe.

            —Es tu bebé Minato, solo tú puedes decidir eso.

    —¿Mi bebé?

Minato soltó un pequeño suspiró y se sentó a su lado, la ciudad nocturna era un poco más ruidosa que lo habitual, se escuchaba cada suspiro de cada persona y cada grito de cualquier emoción, pero Mikoto no podía unirse a ellos.

Su mente estaba trabada en los recuerdos que lo apenaban, como todas las veces en las que decidió por Yuhi, todas las veces en las que le exigió que hacer y si no se cumplía entonces actuaría como un idiota enojado o un idiota triste.

Y no quería hacerle eso a Minato, las decisiones que él tomara solo dependían de él.

     —Me gustaría creer que es solo mi decisión. - Murmuró Minato acurrucándose contra el hombro de Mikoto. -Pero los omegas no decidimos sobre nada.

Sintió la fría mano del omega sobre la suya y suspiró.

              — Si realmente pensaras eso no estarías aquí.— Tomó su mano con delicadeza y cerró los ojos sintiendo el aire frio. — Sin importar la decisión que tomes voy a respetarla.



"¡No te puedes ir! !Yuhi!"


Si Mikoto hubiera sido diferente en ese
entonces, sin importar lo solo que estuviera... no lo hubiera lastimado tanto.

Escuchó la respuesta de Minato, era lo único que podía hacer.

RELEASE [MikoMina]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora