CACAHUATE

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-Déjate tocar.- Le dijo Mikoto a Minato en el pequeño consultorio del hermano de Sarada. -Si te dejas hasta puede ser agradable.

-Odio tu pésima selección de palabras.- Respondió Minato cubriéndose aún más con la ropa de Mikoto.

Minato se había ocultado tras la ropa de Mikoto, capas y capas de ropa innecesaria solo para esconder su cuerpo en ella porque sabía que Ariel el hermano de Sarada iba a revisarlo.

No había de otra, tenían que comprobar que el cachorro estuviera entero y no solo fuera medio humanito o que fuera solo un humanito y no dos. O tres.

Aunque el cuerpo de Minato estaba tan delgado como la primera vez que lo vio que podría solo ser 1⁄4 de humanito.

-Trataré de ser rápido.- Dijo Ariel con amabilidad mientras acomodaba su lugar de trabajo. Sarada esperaba afuera. -Solo revisaré que todo esté en orden. Recuéstate, por favor.

Minato lo tomó del brazo recostándose sobre la camilla, Mikoto se mantuvo cerca. Si bien Sarada lo había empujado dentro del lugar Minato se aferró a su brazo en todo momento, incluso cuando solo estaban de pie hablando a un metro de distancia con el doctor Ariel.

Minato se negaba a soltarlo o darle un respiro, peor que estar en casa, y aunque Mikoto le aseguró que todo estaría bien el chico se negó a cambiar su asustada actitud.

-Me estas pellizcando.— Dijo con una pequeña mueca de dolor.

-Sopórtalo.- Murmuró Minato mirando al techo.

-Entonces... -— habló Ariel. -Catorce semanas... —El alzó la ropa de Minato y soltó su brazo y en cambio se sujetó a su cuello de inmediato como en gato ahogado un poco al mayor, este respiró profundo sin soltar a Mikoto, su cuerpo había cambiado un poco...solo un poco a como Mikoto lo recordaba, quizás el mayor cambio era que el omega parecía estar a punto de salir huyendo de ahí, tan miedoso que no podía ser normal. - Terminemos rápido con esto, no es bueno que te estreses.

-Si te estresas así el cachorro saldrá con ojos pequeños— Regañó Mikoto a lo que Minato apenas sonrió.

-Es mejor que salga así que con los ojos saltones.

-¿Qué?

-Ahí está.- Ariel señalo la pantalla y Mikoto apenas se había dado cuenta del extraño gel y la especie de...pluma que pasaba sobre el estómago del omega.

-Oh, wow, parece un cacahuate.— Mikoto se inclinó para ver. -Minato, cambiemos los nombres, un cacahuate no puede llamarse Katniss o Velami

-¿El cacahuate está bien?- Preguntó Minato.

-Es un poco pequeño, pero todo parece en orden.

Minato relajó su agarre mientras miraba a la pantalla, su pequeño cacahuate podía verse, y era..... solo algo lindo.

Mikoto sonrió.

RELEASE [MikoMina]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora