El día se desplegaba con un matiz de tensión mientras Carlota, respaldada por la determinación, llevaba a cabo la llamada crucial con el narcotraficante asociado. La conversación resonaba en la habitación, marcada por la firmeza de las palabras de Carlota y la gravedad de la situación.
-Escucha atentamente, comenzó Carlota, su voz firme cortando el aire tenso. -La droga desaparecida debe regresar inmediatamente, o te enfrentarás a las consecuencias. No toleraré más amenazas a nuestra seguridad ni a nuestro negocio.
Del otro lado de la línea, se escuchaban murmullos y una respuesta que reflejaba la incertidumbre en la red de narcotraficantes. Carlota continuó, enfatizando la gravedad de la situación y la importancia de resolver el problema de manera inmediata.
Mientras tanto, Anartz observaba a Carlota con admiración y preocupación en sus ojos. Sabía que estaban navegando por aguas peligrosas, pero confiaba en la resolución de su querida amada
A medida que la tensión del desafío se disipaba, Anartz, aunque preocupado por la seguridad de Carlota, no pudo evitar sentir una oleada de celos y un deseo apasionado. Sus ojos, intensos y llenos de emociones encontradas, se encontraron con los de Carlota.
«Carlota», murmuró Anartz, su tono oscilando entre la preocupación y la pasión, -necesito que estés a salvo. La idea de perderte me vuelve loco. Ven conmigo a nuestra habitación, déjame protegerte.
Carlota, percibiendo la mezcla de emociones en su amado, sonrió con ternura. Tomó la mano de Anartz y lo guió hacia su santuario privado, donde las paredes eran testigos de su amor y sus desafíos.
En la penumbra de la habitación, Anartz se volvió más insistente, sus besos y abrazos expresando su deseo de tener a Carlota a salvo en sus brazos. -Eres mi reina, mi amor. murmuró, -y no permitiré que nadie más amenace lo que tenemos juntos.
Carlota, cautivada por la intensidad de Anartz, respondió con un beso apasionado. Entre susurros y caricias, ambos se entregaron al amor que los unía, dejando de lado las sombras que se cernían sobre ellos.
El capítulo 21 culminaba con el fuego de la pasión y la determinación, demostrando que, en medio de los desafíos, el amor de Anartz y Carlota se fortalecía. En su refugio compartido, sellaron un pacto silencioso de protección mutua, desafiando a cualquier amenaza que se interpusiera en su camino.
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SOMBRA DE AMOR
FantasyNO ADAPTAR: NI HACER PLAGIO: DE LA HISTORIA En la oscura y mística aldea de Lunaris, donde la luna llena tenía un significado especial, vivía un joven llamado Anartz. Este chico, aparentemente común durante el día, ocultaba un secreto: al caer la no...