SOMBRA DE AMOR

capitulo 32 Revelaciones al Amanecer: Un Nuevo Día en la Playa

Carlota: Anartz, amor estoy bien. Solo estoy ocupada con un asunto urgente. Te contaré todo más tarde. Cuídate y no te preocupes demasiado. Te quiero.Anartz, al recibir el mensaje, sintió alivio pero también intriga por lo que estaba sucediendo.

Traficantes -no puedes pasar

Carlota -esta bien pues me voy

Desconocido: Vamos, déjenla pasar. Parece que tiene algo importante que decirme.

Los chicos, sorprendidos, abrieron paso a Carlota. La tensión en el aire era palpable mientras Carlota se acercaba al desconocido. Él, con una sonrisa, la invitó a su despacho para hablar en privado.

Carlota, decidida, entró en el despacho del desconocido.

Carlota: Necesito que liberes a mi hermanastro. Está sufriendo, y no quiero que esto vaya más lejos. Además, quiero volver a mi pueblo y retomar mi trabajo como boxeadora.

Desconocido: Carlota, entiendo tus preocupaciones, pero tu hermanastro tiene información valiosa para mí. No puedo liberarlo tan fácilmente. ¿Qué me ofreces a cambio?

Carlota, pensativa, propuso: Lo que quieras, pero mi hermanastro no debe sufrir más. Puedo ayudarte de otra manera.

Desconocido: Carlota tú Tienes un don para el boxeo. ¿Qué tal si luchas por mí en un torneo secreto? Ganarías mucha influencia.

Desconocido: Carlota, aquí en el puti no ganamos lo suficiente. La verdadera fortuna está en el rin, en esos combates clandestinos donde las apuestas son altas y el dinero fluye. Es la oportunidad perfecta para ti, no solo para liberar a tu hermanastro, sino para ganar lo que realmente mereces. ¿Qué me dices? ¿Estás lista para adentrarte en este oscuro mundo?

Carlota: Está bien, acepto tu propuesta, pero tengo mis condiciones. Quiero garantías de que mi hermanastro será liberado sin daño alguno, y quiero una parte considerable de las ganancias para nosotros.

Desconocido: Carlota, entiendo tus condiciones, pero recuerda, este mundo no siempre es fácil de dejar. Sin embargo, garantizo que tu hermanastro estará a salvo. Estás a punto de adentrarte en un camino sin retorno. ¿Estás completamente segura de que quieres hacer esto?

Carlota, con determinación en sus ojos, asintió y respondió: Estoy dispuesta a todo por mi hermanastro y por mi libertad. Pero asegúrate de cumplir tu parte del trato.

Desconocido: Carlota, acepto tus condiciones, pero ten en cuenta que esto no será solo una vez. En los campeonatos de alto riesgo, necesitaré tu presencia siempre que lo requiera. A cambio, obtendrás grandes sumas de dinero y garantizo la seguridad de tu hermanastro y tu futuro esposo. Además, he oído hablar de ese anillo que Anartz planea regalarte en las próximas vacaciones. Mantén tu parte del trato, y ambos saldrán ilesos.

Carlota, sintiendo la presión pero decidida, respondió: Lo haré, pero asegúrate de cumplir tus promesas. Y si algo le sucede a Anartz o a mi hermanastro, juro que haré que pagues por ello.

El desconocido, con una sonrisa astuta, concluyó: Carlota, esto es solo el comienzo de nuestra asociación. Te mantendré informada de cuándo será tu primera participación en el ring. Hasta entonces, prepárate para lo que viene.

Carlota, decidida a proteger a Anartz, miró fijamente al desconocido y agregó otra condición: Hay una condición más. No le diré nada de esto a Anartz. Él no debe saber lo que estoy haciendo. Es crucial para nuestra relación y su seguridad.

El desconocido, después de pensarlo por un momento, asintió: Está bien, Carlota. Tu secreto estará a salvo conmigo. Pero ten en cuenta que, tarde o temprano, las decisiones que tomes podrían afectar todo lo que valoras.