SHE;;;JEON JUNGKOOK

•12

Me encontraba sentado en una de las salas del aeropuerto, estaba esperando a que llegará Kate, quedamos en vernos aquí a las nueve de la mañana, el vuelo salía a las nueve veinte, mire mi reloj, las ocho cincuenta y siete.

—Jimin—

—¿Ya estas con Kate?—

—No, aun no llega—

—Tranquilo, todo saldrá bien—

—Trato de estarlo—

—Tae quiere decir algo—

—Amigo, aprovecha el tiempo con ella, enamorala—

—jaja, okey Tae—

—Yo apoyo lo que dice, bueno suerte.—

—Les aviso cuando este en Londres—

—¡Adiós!—

En cuanto colgué la llamada mire entrar a Kate, vestía unos jeans blancos con un suéter pegado a su figura, una coleta alta y gafas negras, se veía preciosa, aún no podía creer que viajariamos juntos.

Lo siento, el del taxi se perdió. —Reí saludando.

Descuida, aunque no me hubiera molestado pasar por ti.—Me puse de pie.

Esta bien. —Nos sentamos— Aun tenemos tiempo, ¿no olvidas nada?

No, ¿tú?—Voltea.

Tampoco. —Miro alrededor— Tomemos un café, apenas pude despertarme.

Se que es algo temprano
—Reímos y nos levantamos— Vamos entonces.

Nos acercamos junto con las maletas a un puesto en el mismo aeropuerto, era un Starbucks. Pedimos un café ambos y enseguida nos lo dieron, pagué la cuenta y volvimos a los asientos.

Ah que rico se siente. —Dije al beber del vaso.

Lo se —Lo miré— Pensé Tae y Jimin vendrían.

No, ellos no fueron invitados. —Reimos— A mi papá no le agrada mucho que seamos amigos, aunque pertenecen a nuestro mismo círculo.

¿Por qué?—Me sorprendió.

Cuando éramos más chicos hacíamos muchas travesuras, y mi padre siempre me dijo que Tae y Jimin no eran buena influencia —Sonríe— Si supiera, seguro me llevaría lejos de aquí.

Entonces no sabe de los lugares que vas ni nada de eso —Lo miré.

No, si se entera seguro me castiga. —Suspira— Quiere que solo me exclavice en estudiar y en no salir de la casa.

Ayer me dijiste que son muy ausentes... —Pienso un poco antes de hablar.

Si —Baja la mirada— No tengo recuerdos de algún cumpleaños juntos, de alguna vivencia. Siempre se la pasaban trabajando y cuando cumpli quince años se fueron a Londres, la idea era que nos fuéramos los tres, pero yo quise quedarme con mi abuelo paterno, lo hice, pero a los pocos años murió, entonces decidí quedarme en Corea, por mis amigos y mi vida aquí.