No se cuantos minutos estuvimos en esta posición, solo sentía como poco a poco su llanto disminuía, su corazón se controlaba y cada vez era más silenciosa, hasta que la sentí tranquila.
¿Estás mejor?—Dije aun teniéndola en mis brazos.
Creo que si...—Acaricio mi cabeza y entonces nos separamos.
¿Segura?—La miraba a detalle.
Si, gracias por prestarme tu hombro. —Seque la humedad de mis lágrimas.
No es nada —Sonreí.
Moje tu camisa, deberías quitarla. —Le señale la gran mancha.
¿Debería?—Nos miramos y sonreímos.
Bueno, mejor cuando llegues a tu casa. —Volvimos a reír.
Se volvió a escuchar silencio, el me miraba con tanta profundidad como tratando de entender que me pasaba.
Seguro te desconcertó verme así. —Mire mis manos.
Un poco si, no creía que tu llorabas. —Suspira— Te veo tan fuerte que me hace pensar que ese caparazón que llevas esconde secretos.
Lo se, siempre soy tan dura, tan directa. —Sonrió— Creo que todos siempre tenemos algo porque llorar, ¿no lo crees?
Y me lo dices a mi, claro que lo hay, me viste romperme en Londres. —Reí por lo bajo.
Cierto, entonces estamos a mano. —Reimos— Ahora yo soy quien te dice gracias.
Mm...—Inclina su rostro formando una sonrisa.
Se que no te he dicho muchas cosas de mi, pero requiero de tiempo para hacerlo. —Nos miramos— Solo déjame tomar fuerza para hacerlo.
Descuida, debes estar cómoda con ello, sino estás lista no habrá problema —Beso su mano— Todo a su tiempo.
¿Por qué hablas tan bonito?
—Sale una sonrisa de su parte.No se, quizá fui poeta en mi vida pasada. —Juego con su mano, timido.
Yo creo que si, deberías escribir un libro. —Sonrió enternecida.
Tal vez me anime. —Seguí la broma, volviendo a mirarla— Es sorprendente ver que hasta llorando luces hermosa.
Soy suertuda entonces
—Bromee riendo— Gracias de nuevo.No es nada —Miro nuestras manos, quisiera tenerla así siempre.
¡Chicos! —Se escuchó fuera del auto, ambos voltearon.
Ya regresaron. —Nos soltamos y entonces acomode mi cabello.
Bajamos los dos del auto y los chicos se acercaron a nosotros.
¿Qué tal les fue?—Pregunto Jungkook.
Fue genial, aceleramos en la autopista. —Dijo Jin divertido.
Por suerte no había autos, vaya que se sintió la adrenalina.
—Comento Tae.Y la muerte.. —Bajo del auto Jimin tomándose del estómago.
¿Estás bien?—Pregunto ella al verlo de tal forma.
No, se me revolvió todo el alcohol que traía —Contesto a Kate.
Deberías ir a vomitar, no quiero accidentes en mi auto. —Lo señaló el pelinegro.
Yo te acompaño —Lo tomo del brazo Tae alejándose con él.
Jin, debieron conducir con más precaución. —Lo miré cruzandome de brazos.

ESTÁS LEYENDO
SHE;;;JEON JUNGKOOK
Fanfiction-¿No es suficiente con tener mi cuerpo? -No. Te dije que yo era diferente. -¿Qué quieres entonces de mi? -Todo. Un devoto de Kate Sulleman, Jeon Jungkook cae ante los encantos de la preciosa castaña, si los hombres amaran como el pelinegro más perso...