Capítulo setenta y uno

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Tras haber averiguado un engaño más de quién creía el amor de su vida, Charlie subió a su coche y condujo con frustración por la ciudad, intentando ordenar su aturdida mente y también su destrozado corazón.

Finalmente se dió cuenta de que está en la calle del Paraíso, ya que al parecer su subconsciente le había llevado hasta allí.

...-¿Debería seguir y desahogarme con él o dar la vuelta y enfrentarme a los demonios de mi vida?-se preguntó deteniendo el coche a un lado de la carretera.

Tras dudar por unos minutos, este decidió seguir adelante pues no tenía cabeza para ir a la empresa, ni tampoco para regresar a su casa por el momento pero justo cuando llegó frente al edificio, este se encontró con todo el desastre.

Totalmente impresionado apagó el motor y rápidamente se bajó y corrió hasta el precinto policial.

-Amigo no puede pasar, ahí ya no hay nada-le habló un beta anciano que caminaba por la calle hacia su domicilio.

-¿Cu-Cuándo ha ocurrido el incendio?-preguntó el joven empresario muy preocupado.

-Ayer noche pero afortunadamente solo han sido daños materiales, todos salieron bien, ¿Acaso no ha visto las noticias?

Este negó.

-Ni siquiera he tenido tiempo, buen hombre, mi vida es muy complicada. Estoy lleno de problemas

El anciano levantó su mano y le tocó el hombro.

-Jovencito, los problemas tienen solución, solo hay que saber hallarla y darle la importancia que se merece...Quiénes somos es lo único que importa

Charlie asintió y a continuación sacó de su bolsillo, su móvil y entonces buscó la página de noticias donde comenzó a leer para informarse.

Muy angustiado, a continuación llamó al móvil de Babe pero no dio señal, entonces llamó al de Kenta pero este no contestó tampoco.

-Maldita sea

Tras alejarse, decidió acudir a la policía para intentar saber algo más, así que volvió a subir a su coche y nuevamente condujo por la ciudad hasta llegar a la comisaría, donde tras acercarse al mostrador, exigió hablar con un detective que le informara de dónde estaban los ocupantes del prostíbulo pues el agente de recepción no quiere decírselo.

Karn se acerco y le dijo que es el quién se está ocupando del caso y tras pedirle identificarse y su relación con las personas del prostíbulo, este le contó lo ocurrido.

El joven alfa se quedó muy impresionado por las cosas que este le cuenta y las sospechas que tienen, las cuales le hacen tener la certeza de que alguien va a por Babe.

Finalmente este averigua que tanto los omegas, como los gammas están alojados en un motel de las afueras pero aunque insiste mucho en querer saber dónde está Babe, este no se lo dice pues tanto Kim como Kenta no quieren que se sepa de su paradero, ya que temen por la vida del omega.

Totalmente desconcertado, el joven alfa empieza a atar cabos y llega a la conclusión de que quizás su esposo está detrás de todo esto y que lo del accidente, la amnesia y lo demás, solo han sido patrañas, aunque realmente no sabe el porqué de sus actos.

También piensa en que si este realmente resulta ser culpable, no ha podido hacerlo solo, ya que tanto esas desconocidas empleadas desaparecidas, la de la clínica y la del laboratorio y el joven doctor, son sus cómplices.

Sin embargo, las sorpresas desagradables e inesperadas noticias no se terminaron ahí pues tras regresar a la empresa, se encontró con que Pete había aparecido, aunque este estaba de lo más demacrado y malhumorado, por lo que nada más escuchar un reproche por parte de un cliente, explotó.

2. Babe - CharlieBabe  Omegaverse  TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora