Siempre serás una bestia. [Darbella]

EXTRA 10: "ACEPTO"

En medio de la fría noche, un estrepitoso  rugido dejó en evidencia la existencia, en lo más profundo del bosque, de la gran bestia.

Bella y Adam despertaron dentro de una clase de carpa. El calor de la fogata frente a ellos les brindo calor mientras que ambos, en silencio, trataban de hilar todo lo que había pasado hasta ese momento.

—Gerald...Gastón.

Dijo Bella, con voz confundida y luego, la mano de su esposo la hizo verlo a los ojos, notando la preocupación en la mirada de él.

—Rosabella...Bella, debemos...debemos buscarla.

Cuando él iba a ponerse de pie, los dos miraron atentos a la mujer que salió de entre un arco de arbustos. Cubierta con una capa andrajosa, Fleur Enchanta o la loca del pueblo, apareció con una jarra de agua del río.
Ella los miró y les sonrió de forma amable antes de sentarse del otro lado del fuego.

—No pueden, hay lobos por los alrededores. Al parecer...algo los hizo abandonar el corazón del bosque. 

Adam y Bella se miraron. La imagen de la bestia que captó a su hija apareció en los recuerdos de ambos.

—¿Cómo —dijo Bella mientras miraba a la joven—...cómo nos encontraste?

—Estaban cerca del riachuelo. Deberían estar tranquilos a que fui yo la primera encontrarlos... El hijo del capitán los dejó tirados a ambos. Su amigo, el pequeño Jean, quiso ayudarlos... pero, el miedo pudo más que él.

—¿Jean, quiso ayudarnos? No importa eso ahora —espeto Adam—. Los dos nos hicieron esto ¡Gerald dijo que nos ayudaría a buscar a Rosabella!

—Solo lo dijo porque quiere casarse con ella, Adam...nos utilizó.

—Bella...debemos hacer algo. Nuestra... —la voz del hombre comenzaba a quebrarse, algo que hizo que su esposa lo sujetará de sus mejillas para limpiar las pocas lágrimas que comenzaron a caer de los ojos de él— nuestra...nuestra niña esta con ese monstruo.

—La vamos a salvar...Adam...lo tenemos que hacer.

Fleur observaba todo en silencio.
Los sentimientos que brotaban de la piel la pareja le otorgó un sentir que no creía ver nunca más; el amor que había perdurado por años y que dio pasó a esa nueva generación fue una energía que la hizo decidir a salir de las sombras de ser "la loca".

—Yo los ayudaré.

Dijo sin dejar de mirar el fuego.

—Los ayudaré a reunirse con su hija.

Bella la vio con lagrimas en los ojos mientras que ella y Adam se sostenían de las manos.

—¿De verdad lo harás,  Fleur?

Le preguntó con duda Bella, pero la sonrisa de Fleur por haber escuchado que la llamaban por su nombre le dio una respuesta certera. Bella convenció a Adam de seguir a la joven, la cual apagó el fuego al verter el agua de la jarra sobre las flamas.
Con la luz de la luna siendo su única guía,  Fleur condujo entre los árboles a los Beauty, quienes se detuvieron en seco al percatarse del camino que iban siguiendo.

—Nos estás llevando de vuelta al pueblo.

—Mi esposo tiene razon, Fleur. Deberíamos darnos la vuelta,  Rosabella esta en ese castillo con-

—Ella ya no esta ahí.

Les dijo la pordiosera de la nada antes de girarse a verlos. La mirada de Fleur fue profunda, pero por alguna razón ninguno de los se sintió aterrado por sus palabras; Fleur les sonrió antes de que un nuevo rugido, de dolor y despecho, se escuchará en el viento.