Sepsuna mira con una sonrisa burlona a su hermana, aquél hombre la estaba protegiendo y eso era evidente, pero qué significaba qué Serena tuviera un defensor ¿Con qué clase de persona estaba involucrada la idiota de su hermana Serena? Sepsuna vuelve la vista hacía su hermana, se cruza de brazo y espera por una respuesta.
-Quiero qué me regreses esos anillos - Sepsuna mira los anillos en su mano y es cuándo se percata de qué no eran joyas comunes.
-No me digas qué te has casado - Sepsuna pregunta con una sonrisa burlona - Esto no me lo puedo creer ¿Te has casado?.
-Eso no es problema tuyo Sepsuna, así qué entrégame los anillos - Serena exigió.
Sepsuna ve al enorme sujeto da un paso hacía ella obligándola a ceder a la petición de su hermana, sín embargo no estaba dispuesta a obedecer al pie de la letra, así qué sín más Sepsuna lanza el par de anillos lejos de dónde Serena estaba.
-Nooo... Serena grita al mirar en la dirección dónde sus anillos fueron aventados - ¿Por qué has hecho eso? - Serena dice caminando despacio por el lugar.
-Sí sigues siendo una sentimental, ahora entiendo todo, tú fuiste la qué se vendió por dinero, y ahora le debés obediencia a un hombre acaudalado - Sepsuna mira a Serena con una sobren los labios - No pierdas el tiempo, dudo mucho qué encuentre esos anillos.
-Eres una persona horrible Sepsuna - Serena se da la vuelta para verla - No puedo creer qué seas mí hermana, eres tan cruel conmigo - Serena le dice con lágrimas en los ojos.
-Mira cómo me hace sentir de mal tus palabras, eres una idiota, nada de lo qué me digas me afecta, al menos hiciste algo bueno, te volviste la cualquiera de un hombre para salir de tus deudas, qué lastima me das - Sepsuna se da la vuelta para encaminar a la salida.
-Hubiera sido mejor qué vendieras a ese bastardo en vez de tu cuerpo, pero imagino qué te has casado con un pervertido qué sólo disfruta de las embarazadas - Serena la ve alejarse y en ese momento deseo no tener qué volver a ver a su hermana, ya era demasiado y no podía seguir soportándola.
-Señora Chiba, la ayudaré a buscar los anillos, puede esperar en el coche mientras yo busco - sugirió el chófer.
-Yo también quiero buscarlo - dijo Serena.
-Son muchas emociones, necesita descansar un poco, por favor.
El chófer le súplica y Serena entiende qué sí algo le pasaba a él le echarían la culpa, Serena asiente y termina por quedarse en el carro, pero atreves de la ventana podía ver cómo el chófer buscaba enérgicamente sus anillos de matrimonio, Serena junta las manos deseando qué los encontrara, sín embargo Sepsuna los lanzo tan lejos qué creyó qué sería un caso imposible buscarlo.
-Lo siento tanto Darien...
-Mí señora - la voz de su chófer la hizo levantar la mirada.
-¿Los encontraste? - Serena preguntó con esperanzas.
-Lo lamento pero no di con ellos - se disculpó con ellos.
Serena aplana los labios bajando la mirada, ahora no sabía cómo explicarle eso a Darien, el anillo de compromiso era muy costoso cómo para qué Serena lo perdiera de esa manera.
-¿Podemos ir a casa? - Serena preguntó.
-Sí señora, en seguida...
La camioneta se puso en marcha y Sepsuna se percató de ello, frunce los labios puesto qué detestaba la idea de qué su hermana estuviera bien, era un don nadie y ahora tenía chófer, no se creía qué Serena en tan poco tiempo hubiera progresado tanto, siempre se la imaginó cómo una mendiga en la calle, hasta se imaginó qué ese bastardo niño no nacería.
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CAUTIVADO POR UNA EMBARAZADA
De TodoDicen qué el amor verdadero se encuentra en cualquier parte... Sín embargo Serena no lo pensaba así, rechazada y odiada por su única hermana, Serena es expulsada de su propia casa por la única qué se hacía llamar familia, después del reciente fallec...