El jardín de las rosas (Twisted Woderland Disney)

Curiosidad

La epidemia que arrebato la vida de muchas hadas entre ellas el Conde, el Rey y uno de los familiares de Lilia, ya estaba por suerte bajo control, los médicos reales nunca se habían enfrentado a un caso tan extenso por culpa de una flor y sería las mismas flores que traerían el remedio para no reducir más la población.

La pena de Maleficia era grande, vio fallecer a su esposo y sin un minuto para poder pasar su luto tenía que ver por su reino, por su hija y ahora por dos niños que no estaba muy segura si podría llevarlos por buenos caminos y seguir con el legado de sus padres. EL padre de levan fue un conde importante en los asuntos diplomáticos y mensajero al igual que el fiel amigo de la bruja de las espinas, Levan se volvería las alas y los ojos de su amada hija; mientras que Lilia, a pesar de ser un hada "sin hogar" por el accidente que cobro sus recuerdos, la reina veía algo especial en él, esperando que pudiera alcanzar o superar a su padre, un antiguo miembro de la guardia real que cayó en una de sus misiones cumpliendo su deber en dirigir la expedición para encontrar una flor rara que salvaría al reino, era un héroe aunque el Senado Real omitía esa realidad por alguna razón.

El Senado quería desconocer muchas cosas, quería seguir engrandeciendo a la Familia Real, tener un control en cuando al comportamiento que debería tener un hada dragón, incluso cuando no eran necesarios; a Maleficia le cuestionaron sus acciones al acoger a Lilia tras quedar huérfano, y el resguardar a Levan cuando podría "traer la enfermedad" que podría acabar con la vida de muchos en el castillo, en especial con la de su reina y princesa, por ello, Maleficia tuvo que aislar a Levan y a Lilia a una parte del castillo, prohibiéndoles cruzar al otro lado en donde las mismas ordenes seguía la princesa Maleonor por lo menos hasta que ambos infantes dejaran de ser considerados una amenaza.

Levan tras sus sesiones de estudio iba siempre a la torre de Lilia, sentía que al ser los únicos de ese lado del castillo deberían llevarse bien y más porque Lilia estaba aun recuperándose de su accidente, quería hacerle compañía a la vez que también de que de ese modo no se sentía solo.

—Lilia, ¿qué haces?—  pregunto Levan al ver a Lilia sentado a la orilla de su ventana que daba al otro lado del castillo

—creí haber visto a alguien espiando de este lado—  no apartaba su vista de una torre, volviendo a ver como una niña con cuernos negros volvía asomarse y se ocultaba  —¡ahí esta!—

—¿quien?—  Levan se asomo pero no pudo ver a nadie.

—se que la vi, es una niña con cuernos y una enorme cola escamosa—

—debes estar hablando de la princesa Maleonor—  dejo su libro en el borde para intentar subir y estar junto a Lilia  —ella se queda en la parte norte del castillo, nosotros debemos quedarnos en la parte sur, fueron ordenes del Senado—

—esos 3 vejestorios se creen de gran autoridad, ¿tú haz visto a Melonor?—

—si, un par de veces cuando tenemos lecciones de literatura, también cuando ceno con su majestad pero no hemos hablado—  su rostro se mostró un tanto deprimido, tenía la sensación de que no le agradaba a la princesa  —oh, por cierto... escuche que pronto te darán de alta y te unirás a nosotros en los estudios, así que te traje esto, es un libro muy bonito, tiene dibujos—

—¿qué edad crees que tengo?—  le amenazo con arrojar el libro al vació.