HISTORIA INSPIRADA EN LA SAGA DE CREPÚSCULO
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Me pongo a pensar en donde haz estado y si quizá algún día volverás. No he estado tan mal desde que te fuiste pero tampoco soy feliz. Nunca conocí a alguien como tú ¿sabes?
Se qu...
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IZUKU
―Izuku―Me susurró en la oreja―Ya es hora de volver a casa―Hice un mohín revolviéndome sobre su cuerpo
―¿Enserio? Yo quiero seguir quedándome acá contigo, no quiero que te vayas a ninguna parte―Lo abracé más contra mi con toda mi fuerza aún sabiendo que no podía ganarle en lo absoluto
―No me voy a ir nunca de tu lado Izuku―Me separó con la suficiente fuerza que parecía gentil―Más bien tienes que subirte a mi espalda para llegar antes del crepúsculo a tu casa―Se levanto del suelo lleno de vegetación, se veía hermoso en aquella pose, sus facciones se lograban definir más con la luz cálida y le daba un contraste perfecto a su sonrisa en los labios delgados.
―Esta bien pero acércate más―Vi como mi petición se logro, pude sentir nuestras narices rozar y mi corazón palpitar acelerado mientras mi respiración se volvía errática. La obsesión de poder estar con él no era normal, así que no pude resistirlo, le jale del cuello de la camisa dándole un beso casto pero aún así lleno de cariño―Te amo―Musite mirándole a los ojos heterocromáticos
―Yo también―Sus brazos me envolvían todo el cuerpo y cerré los ojos apreciando sus movimientos, me apretujaba hasta que sentí que ya no estaba en el suelo.
Abrí los ojos en sorpresa y ahí lo vi sonreír como nunca antes logre imaginar, era realmente tranquilizador verlo y sentirlo tan cerca. El cómo me levanto del suelo y mis piernas estaban en el aire hacían a mi estomago revolotear, por fin estábamos en la misma altura y sonreí de poder tenerlo así conmigo.
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Cuando llegamos me bajó de su espalda y me acomodó con gentileza en el suelo. Yo busqué en mis bolsillo las llaves, encontrándolas de inmediato y abriendo la puerta de su lado para luego abrir la puerta del conductor.
―Tal vez deberías dejarme conducir―Dijo Shoto
―De ese tema ya quedamos algo―Le recordé
―¿Acordamos algo? No recuerdo haber acordado nada―Se burló y le dirigí una mirada en furia―Bueno puede que hayamos hablado del tema un poco...
